El presentador ha intentado dar pistas al concursante, algo que ya ha hecho en anteriores ocasiones con los finalistas en el escaparate final
En el día de ayer, Pablo ha sido el concursante que ha conseguido llegar hasta el escaparate final de El Precio Justo. Durante todo el programa se ha mostrado muy acertado, pero no ha tenido suerte en la última prueba, en la que se jugaba un importante premio económico.
Carlos Sobera ha dado pistas claras al concursante para que intentara adivinar el precio del escaparate, pero este no le ha hecho caso. Tampoco al público presente en plató, puesto que ha decidido dejarse llevar por su intuición. Una intuición que le ha jugado una muy mala pasada.
Pablo se la pega en El Precio Justo
Antes de comenzar a jugar en el escaparate final, Pablo ha conocido que su margen de error para adivinar el precio justo era de 1.000 euros, el segundo más bajo que ofrece el programa. Asimismo, el concursante tenía la oportunidad de llevarse un bote extra de 37.000 euros.
En esta ocasión, el escaparate final estaba compuesto por una moto, un set de planchado y lavado, un viaje a Cuba y un coche. La primera impresión de Pablo ha sido totalmente equivocada, pero pese a la insistencia de los presentes, ha decidido confiar en ella hasta el final.