El programa de La Sexta estrenó en la noche de ayer el primer programa de su octava temporada, el cual ha provocado que el chef tenga que explicar el truco que utilizan para traer comensales a los malos restaurantes que visitan
Después de una espera interminable, al fin hemos vuelto a ver en acción a Alberto Chicote en Pesadilla en la cocina. En esta ocasión se ha desplazado hasta Vildecans para visitar Il Fogon Della Toscana, un restaurante regentado por una familia gitana que se encontraba en una situación límite. No solo en términos culinarios, que era un completo desastre, sino también en términos económicos.
Antonio José, el dueño del bar, aseguró que tenía una deuda de unos 60.000-70.000 euros. Y es que el restaurante no estaba funcionando como debía, dando unos ingresos mensuales de 4.000 euros que no dan para pagar a la plantilla ni para pagar el local. Pero hay algo que no cuadraba por las imágenes mostradas por Pesadilla en la cocina, algo que ha obligado a Alberto Chicote a explicarse en redes sociales.
Chicote tiene que explicar los trucos que utiliza Pesadilla en la cocina
Viendo la mala situación en la que se encontraba el restaurante, un espectador se ha extrañado de que estuviera completamente lleno. Es por eso que a través de las redes sociales ha mostrado su asombro por esta situación, dejando entrever que tan mal no lo harían para tener tantos clientes. Y ha sido ahí donde ha entrado Alberto Chicote.
Según ha comentado el chef, las personas que hemos visto durante el programa son gente que Pesadilla en la cocina lleva para ver cómo trabajan en el restaurante. De este modo, no son clientes casuales que han decidido comer justo el día que el programa los visita. Algo que hasta este momento desconocíamos de Pesadilla en la cocina.