Una bomba, si no explota, no existe. No se produce un aviso de bomba falso si realmente se quería cometer un atentado. Pero un aviso de bomba, sí que remueve la conciencia. Por lo que cobra importancia la teoría de que se haya producido con la intención de presionar a la farmacéutica.
La amenaza inglesa
Si alguien sale beneficiado en todo esto, son los ingleses, que según el CEO de AstraZeneca solicitaron la vacuna tres meses antes de la Unión Europea. Unos ingleses que están en medio de un brexit que ya deja claro de por sí su opinión sobre la Unión Europea en su conjunto.
Unos ingleses que están seguros de poder seguir siendo potencia mundial sin la ayuda de Europa. Por lo que acceder a las vacunas de AstraZeneca antes que los rivales de la UE sería un golpe encima de la mesa. Habrá que ver en qué queda la reunión de la farmacéutica con Europa y en qué quedan las investigaciones de lo sucedido en Wrexham.