Un cambio de roles ha generado molestia entre partes; una más que se suma a la ya dilatada relación
Continúa la búsqueda de efectivos en ataque por parte del Real Madrid de cara a la siguiente temporada. Florentino Pérez no quiere seguir pasando por las dudas que ha venido atravesando en el presente, y se plantea dar un giro radical para solventar la crisis en la que está envuelto el club. Su objetivo estaba casi listo, pero ha sido Zidane el que ha puesto la zancadilla al tema.
Se trata de Mauro Icardi, punta del Inter de Milán que esta temporada presta sus servicios a manera de cedido en el PSG de Thomas Tuchel. Sus números en la capital francesa está alterando las regularidades, con muchos goles y enormes actuaciones, ha podido encajar perfectamente en el estilo de juego y objetivos al punto de hacerles plantear a los encargados varias posibilidades.
La primera es abonar los 70 millones de euros que impone su opción de compra, un tema que se está tratando con lupa. Lo otro, que en caso de retornar a Italia, sea puesto en venta tan pronto llegue y Real Madrid se asoma como la mejor de las opciones. El presidente merengue es un enamorado de su juego, y con esta son ya varias intentonas de fichaje que le deja caer sobre su mesa.
Icardi se somete por última vez al desprecio de Zizou
No es nuevo que Zidane le rechace, y mucho menos que lo haga de manera abierta y sin tapujos. El estratega galo está convencido que su estilo polémico no es lo que más llama la atención para su equipo. De hecho, por esas mismas razones ha apartado a Gareth Bale, y no se contempla la posibilidad de seguir contaminando un ambiente que está intentando sobrevivir a los duros retos del camino.
Icardi tiene un estilo de juego completamente adverso a lo que practica el cuadro merengue, y ese ha sido su principal argumento. Pero más allá de estos casos, está el hecho puntual de dar congruencia a una política a la que Zidane ha profesado desde su llegada a la casa blanca. Por el momento ha sido todo, y en tanto se siga esta línea, las cosas van a ir moldeando su compostura.
Mauro estaría muy complacido de ser parte del 13 veces campeón de Europa, eso lo ha dejado claro, y así como su vida deportiva ha sufrido una metamorfosis, asimismo espera poder tener la oportunidad de demostrar su talento. Florentino se ha quedado solo en la lucha, y como entregó parte de las decisiones a Zidane cuando lo recapturó, todo indica que este es el fin de los rumores.