La historia de amor entre el rey de España y Gigi Howard, una modelo americana, fue un episodio en la vida del monarca que la prensa no pudo revelar debido a la intervención de la Casa Real
Antes de conocer a Letizia, Felipe VI tuvo numerosas aventuras amorosas, así la prensa, siguiendo las recomendaciones de la Zarzuela, se refería a estas mujeres como “acompañantes” o “amistades”. En este sentido, Felipe VI no era muy distinto a su padre, el rey emérito Juan Carlos I, quien también fue conocido por sus numerosas amantes.
La relación entre Felipe VI y Gigi Howard comenzó cuando el príncipe fue enviado a estudiar a Georgetown por su madre, la reina Sofía. Allí, conoció a la modelo americana, descrita como una mujer de belleza espectacular y liberada. La relación entre ambos avanzó en secreto, mientras en España no se hablaba del asunto, un evento que sale a la luz años más tarde.
La relación se vuelve más pública y las fotos comprometedoras
A medida que la relación entre Felipe y Gigi se hacía más pública, algunos medios extranjeros comenzaron a hablar del tema. La pareja incluso realizó un viaje íntimo a la isla de Saint Martins, donde fueron fotografiados en situaciones comprometedoras. Sin embargo, estas fotos nunca vieron la luz debido a la intervención de la Casa Real. La Casa Real llamó a los directores de las revistas para advertirles que no se toleraría ninguna indiscreción más sobre el príncipe. Como resultado, las fotos más comprometedoras nunca fueron publicadas y se guardaron en un cajón.
Más tarde, un periodista español fue acusado de realizar escuchas ilegales y enviado a prisión. La Casa Real no hizo nada para ayudarle y el periodista se declaró siempre inocente. A pesar de los intentos de su padre y sus compañeros por hacer público el asunto, apenas se habló del tema en los medios españoles. Este periodista fue un ejemplo de lo que podría pasar a otros paparazzi indiscretos si se atrevían a cruzar ciertos límites en sus publicaciones.
Reflexión final sobre el papel de la Casa Real y la prensa
Este episodio en la vida de Felipe VI demuestra el poder que ejerce la Casa Real sobre la prensa. De esta forma puede silenciar ciertos temas para proteger la imagen de la monarquía. Aunque Felipe VI ha dejado atrás su pasado amoroso y ahora está casado con Letizia, es importante recordar que, como cualquier otra persona, también tuvo sus momentos de juventud y relaciones que prefirió mantener en secreto.
Sin embargo, la pregunta que queda es si es correcto que la Casa Real tenga el poder de controlar la información que se difunde sobre sus miembros. De esta forma silencia a la prensa en aras de la protección de la imagen de la monarquía. Una acción que contrasta con toda la información que ha ido resurgiendo en los últimos años sobre la familia real.
