El programa recibe muchas críticas por el jolgorio montado ante el anuncio de una de sus tertulianas
La crisis sanitaria está azotando a la credibilidad de La Sexta por sus constantes críticas a la oposición y su blanqueamiento al Gobierno. El regreso de Zapeando se antojaba como fundamental, ya que siempre viene bien un poco de humor para desviar la atención. Sin embargo, la perfomance de Valeria Ros, que dio una exclusiva de su vida privada en pleno directo, ha dado mucho que hablar.
Además de todos los telespectadores que se mantuvieron pegados a la tele desde entonces para conocer de pie la noticia que dio la Zapeadora: ¡está embarazada! Lo contó en pleno programa durante la vuelta a las emisiones de Zapeando ante la sorpresa de sus compañeros. La cómica, que hace su participación en otros programas de tele y radio destacó su lado más divertido y emocionante.
Su anuncio surgió mientras daba paso a un vídeo en el que diferentes personalidades mostraban cómo llevaban la cuarentena, pero de la que Valeria no atinaba a modular bien, ante las risas del resto de la mesa, hasta que, finalmente, en medio de ese atoramiento, comunicó que está esperando un bebé. “¡Coño, que estoy embarazada!”, exclama la joven entre los gritos y los aplausos de sus compañeros.
Ante esto, siguieron dando paso a otros vídeos a continuación, pero ya toda la atención de Zapeando la atesoraba Valeria, quien empezó una ronda de anécdotas, como por ejemplo, cómo y con quién vivió su primer beso. La zapeadora lo recordó, citando que le ocurrió con 16 años en una discoteca de Irlanda.
El caso es que tanta anécdota está muy bien pero las críticas se cebaron con Zapeando y sobre todo con La Sexta en general. La situación de la cadena no es la mejor en estos momentos y el hecho de vender el embarazo de una tertuliana como noticia bomba no ha sentado demasiado bien entre los espectadores.