El entrenador argentino marca un nuevo objetivo en este periodo estival para la banda derecha defensiva
Simeone, máximo exponente de la ideología combativa del cuadro colchonero, Atlético de Madrid, ha decidido cebarse con su máximo rival, el Real Madrid en todo lo que tiene que ver con los fichajes abiertos que propone este verano. Los merengues concretaron fuertes ataques en el pasado, y sacando piezas vitales, dieron pie a una venganza de cromos que se inició con Álvaro Morata y se extendió hasta la consecución de Marcos Llorente.
Sin embargo, la sed no ha sido saciada, y pretenden seguir haciendo hueco a sus cracks tratando de confeccionar una plantilla dorada, con talento y mucho apego táctico. Ya lo intentaron hace poco con James Rodríguez, pero han sucumbido a las exigencias monetarias, además pensando en la edad de colombiano y sus elevadas consideraciones en cuanto a bonificaciones.
Descartado James es el turno de otro exiliado
Tema a tema se plantean en la directiva del Atlético, y dejando a James a un costado, es momento de empezar a visionar con las verdaderas necesidades. La defensa es el punto más crítico de todo el posicionamiento en la cancha para el ‘cholo‘, y con Trippier rindiendo a buen nivel más las casi sentenciadas salidas de Arias y Šime Vrsaljko es momento para direccionar el rumbo correcto.
Por eso han visto en Álvaro Odriozola una alternativa, más que brillante accesible. Actualmente cumple un periodo de cesión en el Bayern Múnich, equipo que ha dictado sentencia, no comprará su pase. En Madrid tampoco le quieren y se vislumbra luz verde por todos los medios. Un llamado para el argentino, que le tiene en sus planes para ser el segundo al margen del inglés.
La solución como barrera del Real Madrid por Odriozola
Sin embargo, si existe un tema que no permitiría que Odriozola saliera de Concha Espina es sin lugar a dudas su valor de mercado. En las oficinas de Florentino están convencidos que por menos de 40 millones de euros no habrán posibilidades, y muy a pesar del bajo nivel y la falta de ritmo pretenden usar esta postura para cerrar los límites que ha roto el cuadro del Wanda Metropolitano.
Al lado de Hakimi tiene pocas chances y entendiendo esto no estaría descartada una nueva cesión. Atlético ha llegado a ofertar hasta 25 millones, es su apuesta máxima y espera que con la presión del ex de la Real Sociedad todo pueda llegar a buen puerto. De momento las expectativas están a tope aunque parece poco probable que acepten. Eso sí, en esto del fútbol todo es posible. Veremos.