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Perros sin atar ya son multados en Barcelona

Barcelona ha dado un paso más en la regulación de la convivencia ciudadana. Esta vez, el foco está en nuestros amigos de cuatro patas: los perros

La nueva normativa del Ayuntamiento de Barcelona sobre pasear perros sin correa ha generado opiniones divididas entre los ciudadanos. Con 225 zonas habilitadas para que los canes puedan disfrutar de su libertad sin correa, la medida busca un equilibrio entre la libertad de los animales y la seguridad de las personas.

Una medida para mejorar la convivencia en la ciudad

Esta nueva ordenanza no es solo una más en el libro de reglas de la ciudad; representa un esfuerzo significativo por mejorar la convivencia urbana. Se trata de un intento por parte de las autoridades de equilibrar los derechos de los dueños de perros con la necesidad de mantener un espacio público seguro y agradable para todos.

Las sanciones para aquellos que no respeten la norma son severas. Las multas pueden oscilar entre 100 y 2.400 euros, dependiendo de la gravedad de la infracción. Esto incluye no solo pasear a los perros sin correa fuera de las zonas designadas, sino también si los animales suponen un peligro o si se encuentran en parques infantiles.

Niñera de mascotas y perros en el paseo SALUD SVETIKD/ ISTOCK

Diversidad de opiniones entre los ciudadanos

La recepción de esta medida ha sido mixta. Por un lado, hay quienes aplauden la iniciativa, señalando que contribuye a evitar situaciones de riesgo y mejora la limpieza de las calles. Por otro lado, están aquellos que consideran que la medida es excesiva y limitante, argumentando que restringe innecesariamente la libertad de sus mascotas.

“No puedo sacarlo antes de las 9:00. Si tuviera que cambiar de ruta lo haría”, lamenta una vecina. Esta frase encapsula el dilema de muchos dueños de perros que ahora deben adaptarse a las nuevas reglas. La restricción de horarios y espacios específicos para pasear sin correa a sus perros es vista por algunos como una limitación injusta a su rutina diaria.

El bienestar de los animales y la gestión del espacio público

Más allá de las sanciones y las opiniones encontradas, lo que resalta es la preocupación por el bienestar de los animales y la gestión del espacio público. Barcelona cuenta con 109 zonas de usos compartidos y 116 áreas exclusivas para perros. Estas áreas están pensadas para ofrecer un espacio donde los perros puedan jugar y socializar de manera segura.

En estas zonas, los dueños encontrarán todo lo necesario para asegurarse de que sus mascotas y el entorno se mantengan limpios y seguros. Hay bancos, papeleras y fuentes diseñadas para el uso canino. Además, se realiza una limpieza diaria y una desinfección mensual para mantener las áreas en óptimas condiciones.

La convivencia urbana

La nueva normativa de Barcelona sobre el paseo de perros es un reflejo de los desafíos y compromisos de una ciudad que busca avanzar hacia una convivencia más armoniosa. Este equilibrio entre la libertad y la responsabilidad es clave para una convivencia urbana exitosa.

La ciudad se transforma y adapta a las nuevas realidades y necesidades de sus ciudadanos, tanto humanos como caninos. Esta medida, aunque controvertida, es un claro ejemplo de cómo la gestión de una ciudad debe evolucionar para responder a las necesidades de todos sus habitantes.