David Sánchez, hermano del presidente Pedro Sánchez, posee más de dos millones de euros sin ingresos adicionales aparentes
David Sánchez Pérez-Castejón, hermano del presidente Pedro Sánchez, ha declarado un patrimonio que resulta difícil de explicar con su sueldo de 55.500 euros anuales de la Diputación de Badajoz. Según un informe de Vozpópuli, que tuvo acceso a su declaración de bienes, David Sánchez no tiene actividades privadas por cuenta propia ni otras remuneraciones, pero cuenta con un patrimonio de al menos dos millones de euros.
Este incluye tres pisos ubicados en Madrid, San Petersburgo (Rusia) y Elvas (Portugal), además de 63.880 euros en criptomonedas y 114.073 euros en cuentas bancarias. David también declara poseer 1,4 millones de euros en acciones de BBVA. A pesar de su considerable patrimonio, no ha pagado impuestos de IRPF ni de Patrimonio en los años 2021 y 2022.
Controversias y cuestionamientos alrededor de su posición y patrimonio
Esto le permite acogerse a significativos ahorros fiscales, especialmente al ser teletrabajador desde Elvas. David Sánchez, también conocido en el mundo artístico como David Azagra, ocupa un alto cargo en la Diputación de Badajoz desde 2017, obtenido después de que su hermano fuera nombrado secretario general del PSOE.
Su salario, aunque considerable, no parece justificar el notable incremento de su patrimonio. Además de su labor en la diputación, David Sánchez Pérez-Castejón ha conseguido dedicarse a la música en España después de sus estudios en San Petersburgo.
El impacto de la no asociación pública con su hermano
Utilizando el nombre artístico de David Azagra, intenta evitar ser directamente asociado con su hermano, el presidente Pedro Sánchez. Esta estrategia parece ser parte de su intento por mantener un perfil bajo en cuanto a su carrera musical y sus actividades financieras.
Sin embargo, la acumulación de su patrimonio y sus decisiones fiscales siguen generando interrogantes y debates públicos sobre la transparencia y la ética de su situación financiera. La discrepancia entre su ingreso declarado y la magnitud de sus activos ha alimentado especulaciones y críticas en diversos sectores de la sociedad. Estas preocupaciones han impulsado a varios grupos de interés a solicitar investigaciones más profundas para esclarecer la procedencia de su riqueza.
