Messi ha desembolsado entre 3 y 3,5 millones de euros para adquirir una vivienda de diseño situada en segunda línea de mar, frente a la playa de Gavà. Fuentes del sector inmobiliario han explicado a este diario que “solamente la compra de un terreno vacío [equivalente al del futbolista] ya cuesta alrededor del millón de euros, precios que pueden competir perfectamente con Pedralbes, el barrio más caro de Barcelona”.
Vecino de Mascherano
Se trata de una zona residencial donde proliferan las edificaciones de alta gama y donde abundan como residentes las nuevas fortunas rusas, cada vez más afincadas en el territorio. La casa de Messi está situada a cuatro fincas de la residencia de su compatriota, amigo y compañero de equipo Javier Mascherano. El jefecito invirtió 1,8 millones en la compra de su vivienda, hace menos de un año. En la misma calle mantiene una segunda residencia otro ilustre jugador argentino que pasó por el Barça, Juan Román Riquelme.
Messi adquirió su nueva finca a principios de este pasado verano, poco antes de que se destapasen sus problemas con Hacienda. La casa, de 400 metros cuadrados repartidos en jardín, dos plantas y sótano, tiene un aparcamiento con cabida para tres vehículos. En la misma zona cuenta con un jacuzzi y un pequeño espacio para gimnasio. Sin embargo, fuentes cercanas al entorno del jugador aseguran que no es para él.
Imperio inmobiliario
Al parecer, el inmueble de Gavà Mar sería un regalo de Messi a sus padres. Precisamente, su progenitor, Jorge Horacio Messi, es el principal señalado por la Fiscalía en la querella que les acusa de la comisión de un supuesto delito contra la Hacienda Pública. La primera declaración tanto de Messi como de su padre se celebrará este viernes a partir de las 10:30 horas en el juzgado número tres de Gavà.
Con esta nueva finca, el imperio de los Messi se expande todavía más. Actualmente, el delantero argentino tiene su residencia particular en Castelldefels, sometida a reformas, y la casa de enfrente. También ostenta la propiedad de otra edificación en la misma ciudad, donde solían vivir sus padres, muy cerca de la antigua casa de Ronaldinho. En ese trasiego de inversor inmobiliario, Messi adquirió un piso en el barcelonés barrio de Pedralbes hace un año. Ahora añade el inmueble de Gavà Mar a su colección.
