Catorce organizaciones palestinas se comprometen a la formación de un gobierno provisional y a una declaración de unidad frente a Israel
Hamás y Fatah, las dos principales facciones palestinas, han firmado un acuerdo de unidad nacional en Beijing, gracias a la mediación de la República Popular China. El acuerdo, firmado por un total de 14 organizaciones palestinas, establece varios compromisos clave para el futuro político del territorio palestino y pretende avanzar hacia la reconciliación interna y una respuesta conjunta frente a la ocupación israelí.
El acuerdo incluye el compromiso de las partes para: (1) el establecimiento de un gobierno provisional de unidad nacional encargado de gobernar Gaza, (2) la formación de un liderazgo palestino unificado con miras a la organización de futuras elecciones, (3) la elección libre de un nuevo Consejo Nacional Palestino, y (4) una declaración general de unidad frente a los continuos ataques israelíes.
Compromisos para la unidad y la legitimidad política
El establecimiento de un gobierno provisional de unidad nacional supone un paso importante hacia la reconciliación entre Hamás, que controla Gaza, y Fatah, que gobierna en Cisjordania. Ambas facciones han estado enfrentadas durante años, lo cual ha dificultado la creación de una estrategia política común frente a Israel, pero este acuerdo marca un avance hacia la cooperación y la unidad de liderazgo.
El segundo compromiso consiste en la formación de un liderazgo unificado para gestionar las futuras elecciones palestinas. Esta iniciativa busca restablecer la legitimidad democrática de las autoridades palestinas y asegurar que todas las organizaciones estén representadas. Las partes también se han comprometido a celebrar elecciones libres para un nuevo Consejo Nacional Palestino, lo cual permitirá la representación de todas las facciones en los organismos legislativos.
Declaración de unidad frente a los ataques israelíes
Uno de los aspectos más importantes del acuerdo es la declaración conjunta de unidad frente a los continuos ataques israelíes. Las facciones palestinas consideran que, ante el incremento de las agresiones y la ocupación, la única respuesta posible es la unidad interna, con el fin de presentar una postura común que refuerce su posición en las negociaciones internacionales y ante la comunidad global.
La mediación de China ha sido un elemento clave en la consecución de este acuerdo, demostrando el interés del gigante asiático por desempeñar un papel más activo en la diplomacia de Oriente Medio. Beijing ha buscado posicionarse como un mediador creíble, capaz de facilitar el diálogo entre actores que históricamente han estado divididos. Este papel podría otorgar a China un papel más relevante en futuras conversaciones y en el proceso de paz de la región.