Sus días parecen estar contados en La Casa Blanca
La temporada para el Real Madrid ha tenido varias formas. Empezando por el arranque, malo por no decir que fue un fracaso, en donde hubo incluso una amenaza de despido para con Zinedine Zidane, su entrenador. Y en ese orden ha sido la plantilla la que más ha acarreado con la carga, dejando a Luka Modric como uno de los más afectados. El croata ha bajado sus prestaciones, tanto así que a sus 34 años evidentemente no es el mismo.
Hace poco ha levantado el Balón de oro, y de ahí en más todo ha sido resta en su vida deportiva. De los 38 partidos disputados solo ha podido estar en 29, 18 de ellos como titular, y de los que solo ha ido los 90 minutos en 7 de ellos. Su rendimiento físico estuvo en medio de la polémica, y la solvencia de la que se conoce para el manejo pasó a un segundo plano con la explosión cantada de Fede valverde.
En la recta final de la temporada anterior ya se hacían planes con su potencial salida y el invierno fue de nuevo una ventana abierta, el caso es que no han llevado a nadie y eso le mantiene en pie. Modric pretende mejorar sus ingresos pidiendo un aumento de ficha, a lo que Florentino se ha negado, siendo ese el causal de las molestias que ahora mismo lo tienen en medio de una búsqueda del que pueda ser su último gran contrato.
La salida del croata está en manos de su representante
Con el tema ya mucho más definido, Luka Modric ha decidido seguir al pie de la letra su plan B, que incluye escuchar las ofertas que lleguen de otras partes donde le den el valor que él considera debería tener. Para eso su representante se encuentra trabajando, todo en vista de tener todo mucho más definido de aquí a que se abra el libro de pases del verano.
Su contrato se vence en el mercado estival de 2021, eso quiere decir que si le quieren sacar algo de valor, deberán negociarlo ahora mismo, de lo contrario se irá con su ficha en la mano y eso es de por sí ya un golpe certero. En su momento se pretendió poner como pago a la llegada de Pogba, pero se acabó quedando y ahora la situación es esta.
A la directiva le está quedando mucho trabajo por delante, como Modric hay otros casos más y ya es preocupante. Zidane va por la delgada línea de caer en el fracaso, y las tareas deportivas son muy demandantes. Para regresar a lo más alto necesita una re estructuración pues con lo visto hasta acá se está quedando muy corto a nivel continental.