Quiere que se brinde una continuidad para poner un pie al frente de la negociación con la entidad culé
Fabián Ruíz no para de ubicarse en la zona más alta de la lista de prioridades de clubes como el FC Barcelona y el Real Madrid. Sin embargo, y al tratarse de un jugador referencia para el Nápoles, han estado en la tarea desde la entidad del sur de Italia por blindarle, poniendo de por medio una cifra económica importante para los tiempos que vivimos.
A sus solo 24 años, se ha ganado la confianza de Genaro Gatusso, y se ha proclamado como el líder de un centro del campo hecho y diagramado para dominar con el balón en sus pies. Es por ese motivo que Aurelio de Laurentis no se da por vencido, y quiere liquidar cualquier amenaza ofreciendo mejoras y una ficha elevada para espantar a los pretendientes.
Un medio del país transalpino recoge que el monto exigido es de 60 millones de euros. Cifra lanzada hace apenas un par de días luego de conocerse que los pasos de los gigantes españoles seguían de nuevo al ataque. Esa es una postura que pretenden sea lo suficientemente convincente, y que resulte favorable de acuerdo a las proyecciones que ellos tienen como club deportivo. Pero Fabián es claro, quiere jugar en Barcelona solo si Setién continúa al frente.
El guiño es inevitable y Bartomeu lo sabe
Siguiendo por ese camino, hay situaciones que hacen pensar que las cosas van por el sitio correcto, el de la tranquilidad al conocerse las ideas individuales del jugador. En Barcelona confían al extremo que éste pasará a ser futbolista blaugrana cueste lo que cueste. Y es que las señales son claras, una vez que Fran Soto ha dejado al descubierto un hecho bastante peculiar.
El preparador físico del FC Barcelona ha admitido que el mismo Fabián le ha entregado 4 camisetas suyas, con el único fin de sumar un obsequio a los líderes del cuerpo técnico donde destacan: Quique Setién, Eder Sarabia y Jon Pascua. Una muestra más del cariño y aprecio del centrocampista a su ex entrenador, que de hecho es el que le ha puesto a jugar al nivel que exhibe hoy en día.
La pasta y las exigencias, Bartomeu conoce de primera mano las condiciones estipuladas para hacerse de una de las promesas más importantes del momento. Si logra sumar a Fabián, se estaría quitando un enorme peso de encima, el mismo que su cantera no ha podido borrar luego de las frustrantes carreras presentes de Carles Aleñá y de Riqui Puig.