Se ha abierto una investigación formal ante el caso dispuesto en Inglaterra
Kieran Trippier, lateral derecho colchonero, ha sido recientemente vinculado a una investigación por parte de la Federación inglesa de fútbol, por incumplir una de las leyes internas. Al parecer y como queda descrito en la denuncia, el ex Tottenham, habría apostado a través de una reconocida casa, por su contratación con el Atlético de Madrid el verano pasado.
Este tipo de situaciones no están permitidas, la ley las penaliza y mantiene un fuerte control sobre el hecho. Ha sido para la FA una de las muestras más ruines que tiene un profesional sacando provecho de la información obtenida gracias a su privilegiada posición. Como se ha sabido, se busca que la investigación reúna las pruebas suficientes para aplicar sanciones ejemplares.
Concretamente, ni él, ni sus familiares o allegados pueden estar inmersos en un evento como éste, eso al menos es lo que dice la norma general. Por otro lado la fecha límite para que el futbolista tiene para que responda por este hecho es el 18 de mayo, momento para el cual tendrá que defenderse del ataque que ha querido imponer dicho ente organizador.
Trippier manifiesta estar tranquilo
Una acusación de semejante magnitud no sería para nada un hecho tranquilizador. Sin embargo, el inglés de 29 años ha manifestado estar en paz, e incluso se ha comprometido en ayudar a la aclaración del tema. Para ello deberá aportar pruebas suficientes, pruebas soportadas en contextos reales.
Las multas que se pueden imponer en este sentido son mayúsculas, y por tanto no solo el jugador sino el club están atentos al desarrollo de esto. un llamado de alerta a los demás a manejar prudencia, a estar atentos a los detalles y a controlar su entorno de una manera hermética. La FA ha advertido llegar hasta las últimas consecuencias.
En nada tiene que ver este hecho con el desempeño del jugador, desde su llegada excepcional. Se ha ganado muy pronto la confianza de Simeone, y ha dejado atrás otras apuestas como el colombiano Santiago Arias. Ya veremos en qué para todo este escándalo, que de momento no amenaza con su lugar de privilegio en el interior del grupo profesional.
