Jaime del Burgo reta a Felipe VI y Letizia a responder sobre recientes declaraciones
Jaime del Burgo ha generado revuelo con un ultimátum contra Letizia y Felipe VI, aprovechando su retorno a la red social X con declaraciones que desafían directamente a los actuales monarcas de España. En un post cargado de desafío, el empresario invita a los reyes a pronunciarse sobre las controversias que han surgido en los últimos meses, relacionadas con su supuesta relación extramatrimonial con la reina Letizia y otros escándalos de la Familia Real.
Este lunes 4 de marzo, Del Burgo no solo se dirigió a la pareja real sino también a Pedro Sánchez, ofreciéndoles una ventana de 48 horas hasta el 6 de marzo para rebatir cualquiera de sus afirmaciones. Estas acciones ponen en una situación delicada no solo a los reyes sino también al presidente del gobierno, al abrir un canal para “todas las preguntas, comentarios o reproches” que deseen hacerle.
Escándalos pasados y nuevas revelaciones
La polémica no es nueva en torno a Jaime del Burgo, especialmente después de haber ventilado detalles sobre un affaire que asegura haber tenido con doña Letizia, además de exponer secretos íntimos de la Casa Real. Estas declaraciones incluyen desde la supuesta intención de la reina de fugarse a Estados Unidos con él hasta la propuesta de tener un hijo por gestación subrogada.
Este compendio de revelaciones y acusaciones ha puesto en jaque a la realeza española, afectando la imagen pública de la reina Letizia y planteando interrogantes sobre la respuesta de Felipe VI. Del Burgo ha utilizado su plataforma en X para divulgar estos escándalos, lo que ha intensificado el interés público y mediático en sus próximas acciones, incluida la publicación de su libro, “Y nada más que la verdad”.
Repercusiones y el desafío pendiente
El desafío de Jaime del Burgo marca un antes y un después en la relación entre la prensa y la Familia Real, al poner en el foco público detalles escabrosos y presuntas verdades ocultas. Este ultimátum no solo busca respuestas de los principales involucrados, sino que también evidencia una estrategia calculada por parte del empresario para mantenerse en el centro de la atención mediática.
La Casa Real y Pedro Sánchez enfrentan una disyuntiva crítica, ignorar las provocaciones de Del Burgo, arriesgando que el silencio sea interpretado como una admisión tácita, o confrontar sus afirmaciones, entrando en un terreno mediático potencialmente peligroso. La decisión que tomen podría tener implicaciones significativas para su reputación y la percepción pública en los próximos meses.
