Los asturianos competirán con la localidad gaditana de Olivera en una contienda llena de emoción y diversión asegurada
Desde el verano pasado, el popular programa televisivo Grand Prix ha vuelto a captar la atención de los españoles. Este show familiar, que comenzó en 1995, dejó de emitirse en 2005 después de veinte años de éxito. Para sorpresa y alegría de muchos, Grand Prix ha regresado con su famosa vaquilla, enfrentando nuevamente a pueblos de toda España.
El 15 de julio será el turno de Asturias, representada por la localidad de Cangas de Onís, que competirá contra Olivera, Cádiz. El equipo asturiano contará con destacados deportistas para demostrar su habilidad frente a los gaditanos. Ramón García, el presentador del programa, dirigirá algunas de las pruebas más tradicionales del concurso, como la patata caliente, el árbol de la suerte y los pingüinos matemáticos. En total, habrá 31 juegos, narrados por García y Cristina López, con la participación del carismático gimnasta Wilbur.
Preparativos y expectativas para el Gran Prix
Todos los juegos serán comentados por García y López, con la colaboración de Wilbur. La identidad de los padrinos de Cangas de Onís aún es un misterio, pero RTVE ha dejado entrever algunos nombres como Miki Nadal, Alba Carillo o Ana Guerra. La expectativa es alta y se espera una competencia emocionante.
El equipo de Cangas de Onís ha estado entrenando intensamente, incluyendo sesiones de prácticas con las mismas pruebas del programa. Este esfuerzo demuestra su dedicación y el deseo de ofrecer un espectáculo inolvidable. Participar en el Gran Prix es una oportunidad para mostrar su fortaleza y entretener al público.
La comunidad y su apoyo a los participantes
Los habitantes de Cangas de Onís han mostrado un gran apoyo a su equipo, organizando eventos y actividades para recaudar fondos y motivar a los participantes. El entusiasmo en la comunidad es evidente, y se espera que su participación en el Gran Prix sea tanto una competencia como una celebración de su espíritu comunitario.
Por otro lado, en Olivera, Cádiz, la preparación también ha sido rigurosa. Los gaditanos, con una rica tradición en festividades y competencias locales, están listos para dar lo mejor de sí en el Gran Prix. La competencia amistosa entre estos dos pueblos promete añadir una dosis extra de emoción al evento.
