El presidente de Castilla-La Mancha se opone al pacto que permitiría a Cataluña gestionar todos los impuestos nacionales
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha criticado duramente el acuerdo entre PSOE y ERC sobre la financiación de Cataluña. Este pacto permitiría a la comunidad catalana gestionar todos los impuestos, incluidos los recaudados a nivel nacional.
En una declaración institucional sin preguntas en el Palacio de Fuensalida, García-Page expresó que el independentismo no puede tener las llaves de la caja después de haber asegurado que “España nos roba”. Además, subrayó que Salvador Illa debería ser presidente de Cataluña, pero no a cualquier precio, y que su investidura no debería pagarse a costa del resto de territorios de España.
Comparación del reparto de financiación autonómica con el impuesto de la Renta
Para explicar su posición, García-Page comparó el reparto de la financiación autonómica con el impuesto de la Renta, destacando que este último es progresivo y pagan más los que más ganan. Insistió en que los impuestos no deben parcelarse y que no permitirá que las cuentas se hagan con cada región sin tener en cuenta al resto. Asimismo, criticó al independentismo por sus tonos “relativamente xenófobos y despreciativos del resto de los españoles”, calificándolos de “la negación de la izquierda y muy reaccionarios”.
García-Page reiteró que no permitirá que el acuerdo entre PSOE y ERC se materialice, afirmando que este planteamiento “no tiene posibilidad ninguna de prosperar en el Congreso” y que sería “una patada al puzzle constitucional y una vuelta a empezar”. Confía en que su partido no tolerará esta propuesta.
Aprobación del recurso de inconstitucionalidad a la Ley de Amnistía
El presidente de Castilla-La Mancha también anunció la aprobación del recurso de inconstitucionalidad a la Ley de Amnistía por el procés catalán, que se presentará próximamente en el Tribunal Constitucional. Esta medida fue aprobada por el consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha este martes.
García-Page anticipa críticas y descalificaciones, señalando que será calificado como “facha” o “de derechas”, pero reafirmó su postura sin pedir disculpas. Declaró que no cambia de opinión constantemente y que quienes piensan que lo ofenden se equivocan. Estas declaraciones se dieron pocos minutos antes del balance del año que realizó el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, antes de concluir el curso político y comenzar sus vacaciones.