Los padres de la princesa Leonor protagonizan un momento de tensión frente a todo el público andaluz que destacan la frialdad entre la pareja
Los Reyes de España, Felipe VI y Letizia han visitado tierra andaluza para dar la bienvenida a la jornada que nos espera llena de fiestas, momento en el que los presentes han notado un poco de frialdad en el matrimonio. Ambos individuos de la Casa Real han pasado todo el evento sin compartir más de dos palabras, lo cual ha hecho saltar las alarmas de todos los que estaban alrededor.
Mientras que Felipe VI y Letizia se comportaban de manera amigable con todos los visitantes que se habían desplazado para ver su rostro, no pasaba lo mismo entre ellos. Por supuesto, hay que tener en cuenta que están en un acto público donde invierten horas pendiente a todo el espectáculo callejero que está teniendo lugar en ese momento, por lo cual es normal que no se prestaran atención.
Signos claros de sensibilidad entre la reina Letizia y el rey Felipe VI
Esta escena contrasta con otro de los sucesos vividos entre la reina y uno de sus escoltas, donde se muestra la sensibilidad actual que vive Letizia. La madre de la futura reina de España pidió que cerraran un poco más una de las puertas puesto que estaba recibiendo una bocanada de aire fresco de la calle. Un ejemplo sencillo de lo sensible que se encuentra la reina.
Aún así, puede que sea simplemente un momento de tensión en el matrimonio, como suelen vivir todas las personas terrestres. Aunque por supuesto no hay similitud puestos que ellos discurren un papel mucho más importante en la sociedad, por lo cual otro divorcio en la familia real no se podría dar, teniendo en cuenta que la reina ya viene de una relación pasada.
El divorcio actual de la Casa Real protagonizado por la infanta Cristina
Cabe destacar que aunque los reyes ven más difícil la ruptura de su relación, no ocurre lo mismo con las infantas. Así mismo lo hemos podido comprobar con la Infanta Cristina, la cual no está pasando por un buen momento debido a la aceleración del divorcio con Iñaki Urdangarín. El ex yerno de Juan Carlos I exige nuevas cláusulas en el documento, para sellar su silencio.
Debido a la gran cantidad de información de la que dispone Iñaki sobre la Casa Real, esta debe hacer todo lo posible para que no se filtre. Por ello, se ha incluido un pago mensual con el cual puede hacerse cargo de todos los beneficios perdidos que antes obtenía de la Casa Real. De la misma forma, también encontramos el pago de 2 millones de euros por un libro que no podrá publicar.