El presidente del Gobierno de España deja a las claras quien manda en el PP de Feijóo
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha vuelto a poner sobre la mesa la presión que diversos actores externos ejercen sobre el Partido Popular (PP) en el contexto del acuerdo de renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). En la sesión de control al Ejecutivo celebrada este miércoles en el Congreso de los Diputados, la regeneración democrática fue el tema central del enfrentamiento entre Sánchez y el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo.
La regeneración democrática en debate
Pedro Sánchez, que en abril prometió un “punto y aparte” en la política española con un plan para combatir el lawfare y los bulos de la ultraderecha mediática, además de blindar las instituciones frente a la proliferación del “fango” en el debate público, defendió su postura en la sesión de control. Este plan de regeneración incluye la renovación del CGPJ, un proceso que ha sido constantemente bloqueado por desacuerdos entre el PSOE y el PP.
Alberto Núñez Feijóo abrió la sesión de control cuestionando duramente el plan de Sánchez. Feijóo acusó al presidente del Gobierno de permitir insultos y calumnias desde su partido. “¿En qué punto de su plan de regeneración democrática se permite mofarse de desaparecidos, llamar drogadicto a un jefe del Estado o denigrar a un ciudadano?”, preguntó Feijóo, aludiendo a los enfrentamientos recientes entre el ministro de Transportes, Óscar Puente, y el jefe de prensa de Alvise Pérez, Vito Quiles.
Feijóo insistió en que Sánchez tiene un problema con la Justicia, más que con el Poder Judicial. El líder del PP argumentó que para Sánchez, lo importante no es el ‘qué’, sino el ‘quién’, permitiendo a sus aliados insultar y calumniar impunemente. Feijóo también recordó las 60 medidas propuestas por el PP para mejorar la calidad democrática en España, afirmando que no habrá regeneración mientras Sánchez siga en el poder.
Obstáculos en la renovación del CGPJ
Pedro Sánchez reconoció la buena salud democrática de España, pero subrayó que el principal problema es el bloqueo del PP a la renovación del CGPJ. Cada vez que PSOE y PP están cerca de un acuerdo, las figuras clave del PP —como José María Aznar, Isabel Díaz Ayuso y Santiago Abascal— intervienen para frenar los avances, según Sánchez.
Sánchez ironizó sobre la actitud de Feijóo, preguntándose cuál versión del líder del PP prevalecería: “¿El que cumple con el mandato constitucional o el que obedece a sus jefes?”. También aprovechó para criticar las acciones de los gobiernos de coalición del PP con Vox en varias comunidades autónomas, citando la legislación para controlar el Consejo de Transparencia en Madrid y la prohibición de investigar los fallecimientos en residencias durante la pandemia.
El presidente del Gobierno advirtió a Feijóo que la legislatura se le haría larga si continúa con su postura actual y enfatizó que la renovación del Poder Judicial se llevará a cabo “con o sin ellos”. Sánchez instó a Feijóo a elegir entre sus jefes o los acuerdos de Estado, dejando claro que el Gobierno está decidido a avanzar en la regeneración democrática y en la renovación del CGPJ.