Las principales marcas de ropa sufren una profunda reconversión
Es evidente que la cuarentena ha cambiado la forma de afrontar el día día. Pero no sólo se han modificado las necesidades más primarias. También el modo de atacar a los caprichos. Es evidente que para comprar no se puede acudir a las tiendas. Las web de Stradivarius, Bershka, Mango y demás, han tenido que adaptar su negocio al confinamiento.
Para afrontar la crisis y que las pérdidas sean lo más pequeñas posible, las principales tiendas de ropa low cost han introducido descuentos agresivos y cambios en el método de envío. Lo principal es la salud y cumplir con las restricciones del Estado de alarma.
Pero rápidamente se ha visto un claro cambio en la forma de comprar. Ahora se busca ropa más cómoda, ya no se va tanto a sorprender al personal, puesto que nos tenemos que quedar en casa. Por eso ahora se ven secciones nuevas en las principales tiendas.
Mango por ejemplo ha introducido en el apartado mujer ropa mucho más holgada que en otras temporadas. Hay pantalones de punto o cordones, faldas largas, vestidos camiseros o de punto, jerseys amplios y camisetas de algodón.
Algo similar sucede con Stradivarius, Bershka o Oysho. Las firmas de Inditex han introducido como “Ropa en casa”, “Vestida para no ir a ningún sitio” o “Cuando estoy en casa”, en clara alusión a este momento que atraviesa el mundo por culpa del coronavirus.