Desmontando un Elefante aborda los efectos del alcoholismo en la familia y marca el debut de las actrices como madre e hija en pantalla
Emma Suárez y Natalia de Molina se unen por primera vez en la película Desmontando un Elefante, dirigida por Aitor Echevarría, para interpretar a una madre alcohólica y su hija aspirante a bailarina. Durante la promoción del filme, ambas actrices destacaron cómo el rodaje cambió su percepción sobre las adicciones y el impacto del alcoholismo en las relaciones familiares. La película narra la historia de Marga, una arquitecta que regresa a casa tras rehabilitación, y Blanca, su hija, que lucha por encontrar el equilibrio en su vida.
Natalia de Molina confesó que la experiencia de grabar la película la hizo reflexionar sobre la presión social por consumir alcohol, una realidad que se normaliza en la sociedad. Emma Suárez, por su parte, destacó que esta película no solo aborda el alcoholismo, sino también las múltiples adicciones que afectan a las personas en el día a día.
Cómo el rodaje transformó la relación de las actrices con las adicciones
El impacto de Desmontando un Elefante no se quedó únicamente en la pantalla, ya que ambas actrices reconocen haber desaprendido ciertos hábitos tras el rodaje. Emma Suárez reveló que dejó de fumar después de finalizar el proyecto, mientras Natalia de Molina reflexionó sobre lo normalizado que está el consumo de alcohol. Marc Giró, quien acompañó a las actrices durante el estreno, también confesó haber abandonado el alcohol completamente y criticó el estigma social hacia quienes no beben.
La química entre Emma Suárez y Natalia de Molina fue un elemento clave en el desarrollo del filme. A pesar del respeto inicial durante la grabación, ambas actrices lograron una conexión que traspasó la ficción, mostrando en pantalla la complejidad emocional que vive una familia afectada por las adicciones. La película, grabada en junio de 2023, es una invitación a reflexionar sobre la influencia social de las adicciones y el impacto personal de enfrentarlas.
El mensaje de la película y su relevancia social
Desmontando un Elefante no solo explora el alcoholismo, sino también los efectos psicológicos y emocionales que genera en el núcleo familiar. Además, invita a reflexionar sobre la normalización de las adicciones en la sociedad actual. Esta obra destaca por su enfoque humanizado y realista, dando voz a temas complejos que suelen ser invisibilizados.
El filme no solo está recibiendo buenas críticas, sino que también sirve como una herramienta de sensibilización para el público, mostrando cómo las decisiones personales pueden transformar la vida de quienes nos rodean. Con una narrativa honesta y emotiva, Desmontando un Elefante promete dejar huella tanto en espectadores como en la industria cinematográfica.