Su desarrollo en este último tiempo lo tienen como una de las esperanzas del club a futuro
Desde la llegada gloriosa de Monchi, al Sevilla se le ha hecho todo mucho más sencillo en temas relacionados a fichajes y gestión de jugadores. La experiencia del director deportivo está más que soportada, y esta vez van al frente con un o de los que fuera uno de sus más prometedores activos, Carlos Fernández.
El delantero, que tuviera formación en Nervión, explotó por allá en el año 2013. Su pasaje era de lo más destacado y hasta llegó a componer la plantilla del Sevilla Atlético en su ascenso a segunda división. Pero fue hasta el 2016, y bajo las órdenes de Jorge Sampaoli que todo empezaba a verse claro. Debutaba con gol, y le daba el triunfo sobre la hora a los suyos ante la UD Las Palmas.
Un mes después se lesionaba de gravedad, se rompía los ligamentos y eso le tiraba al traste su evolución. Su recuperación lenta y la vuelta a escena igual, volvía al equipo base anotando 8 goles, y 1 con el equipo principal. Las cesiones han sido la fórmula hasta que en el Deportivo La Coruña alcanzó su mejor nivel.
Carlos Fernández y su nueva oportunidad
Tras ires y venires, cesiones, decepciones y derrotas fuertes, Carlos Fernández ha caído de pie en Granada, equipo que le ha sabido sacar su mayor potencial. En parte se debe a que está bajo las órdenes de Diego Martínez, un entrenador que ya lo tuvo en las divisiones menores y que supo exponer su calidad a la máxima potencia.
Ayer ha sido figura, ha anotado uno de los goles pero ni por eso ha sido suficiente para lograr la clasificación. Un momento de profunda reflexión que le tienen de nuevo en los planes de Monchi para la temporada que viene. Lleva 10 goles y ha repartido tres asistencias en lo que va de temporada, mucho más de lo que acumula cualquier delantero de la plantilla actual.
Eso les ha hecho revisar su caso y tal parece podría darse un retorno a partir de junio. Tiene todas las condiciones para estar al frente del ataque sevillista y de hecho su deseo siempre ha sido ese. Veremos en qué condiciones se dan los acuerdos, tema que a la gente no parece preocuparle bastante, al frente de todo está Monchi, un viejo zorro en estos casos.