Todo corresponde a una estrategia que lidera en entrenador merengue
De los casos más complejos en la plantilla del Real Madrid sin duda está el de Gareth Bale. Hace ya mucho tiempo que no juega, dejó de ser relevante para los esquemas de Zidane y su valor de ficha es uno de los más altos en los libros contables. Todo eso ha llevado a las directivas a centrar su acción en un hecho específico que contempla mantenerlo en la banca para evitar su exposición y así hacer que siga perdiendo valor.
Como era de esperarse, y como ya ha salido a la palestra durante toda la temporada, Bale es un jugador que no pretende ser mantenido por la cúpula del cuadro merengue más allá de este mercado estival. Los motivos se caen por su propio peso, Zidane no le tiene en cuenta y cada que tiene la oportunidad no justifica lo que cobra con juego.
Si le ponen en el campo queda en ridículo, como lo visto en sus últimas apariciones. Por tal motivo han adoptado una medida bastante peculiar, intentando congelar el valor del jugador, maniobrado en la delgada línea de su estado de salud y condiciones para posicionar su valor tan alto como puedan.
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Hace unos años venía bien, y de hecho fue una pieza de mucho valor en la consecución del tri campeonato europeo. Pero hoy de eso no queda nada, Bale es una sombra y sus actos de indisciplina como los de rebelión le han hecho pasar más de un mal momento. Ahora mismo está en la lupa, todos le quieren en el club fuera de el y en parte esto tiene muchas formas de interpretarse.
Que gane valor es un tema, que se mantenga otro, y en definitiva que lo pierda es la constante. A los jugadores top no les queda de otra que jugar a un enorme nivel jornada a jornada, solo de esa forma mantienen su estatus y pueden cobra lo que cobran. Bale viene en curva descendente, y de hecho algunos de sus pretendientes ya se han echado para atrás.
El presidente ya no sabe qué más hacer, tiene claro hacía a donde apuntar pero las vías no se clarifican. Perderle este mercado de verano es la mejor opción, pero para ello necesita cuajar una venta favorable que incluya una buena cantidad de millones de euros que a su vez permitan perfilar las contrataciones de Mbappé o de Erling Halaand.
