Como medida cautelar el asturiano se ha llevado una fuerte masa de productos y los ha publicado en sus redes sociales
Fernando Alonso, doble campeón del mundo en el automovilismo ha estado en el ojo del huracán tras los últimos sucesos que tiene que ver con la prevención del gobierno ante la amenaza de la pandemia del coronavirus. En sus redes sociales este personaje emblemático del deporte español ha levantado la polémica, subiendo fotografías con grandes reservas de elementos de consumo.
Con frases de familiaridad ha abierto el caso, y es que si se debe luchar contra esto se debe hacer en conjunto. Pero para nadie ha caído muy bien en gracia el despilfarro de los recursos. Son decenas de botellas de agua, las que él ha reunido para estar acuartelado por al menos 15 días en su hogar, respondiendo al llamado general.
Esto tiene que ver con la posibilidad de unos y otros de adquirir elementos de primera necesidad. No se puede rayar en lo absurdo, y a los más favorecidos tomar el control de los que menos chance al dejarlos sin víveres a su alcance. Ya se ha visto la escasez que con este tipo de ejemplo se convierten en una problemática realmente cruda.
Las malas interpretaciones de Alonso lo llevan a estar en medio de la crítica
Cuando se habla de trabajo en conjunto se habla de una correcta comprensión de los eventos. No se puede exagerar y mucho menos ejemplarizar de ese modo. Las redes sociales han sido su cruz, pues allí las respuestas han sido realmente fuertes. Con imágenes como la última que ha difundido, sus seguidores no se han quedado callados.
El ejemplo no ha sido tomado como eso justamente, pues por el contrario, si se llama al consumo masivo, se va a dejar sin opciones a quienes todavía no ven como tal lo que sucede. A eso se refiere el comunicado estatal, y vaya que si le ha costado al piloto. Por el momento si bien es cierto que el tema ha escalado, su control depende de todos.
La gente ha entrado en alerta máxima, y los casi 3.000 casos identificados generan precisamente un fuerte eco. Los deportistas han sido los primeros en salir al frente, y como ya se ha evidenciado, la cancelación de los eventos ha sido el primer paso. Fernando Alonso sigue recluido en su hogar, al parecer preparado incluso para sucumbir la embestida hasta por un año.