El presidente de Rusia reconoce que hasta el momento no han conseguido todos los objetivos esperados en su nuevo enfrentamiento
Las tensiones crecen en el conflicto en la Guerra de Ucrania con el Kremlin, con el transcurso de 441 días desde su inicio. Gran Bretaña ha inclinado la balanza al proporcionar a Kiev misiles de crucero de largo alcance Storm Shadow, según un funcionario occidental. Este nuevo apoyo podría permitir a las fuerzas ucranianas golpear las tropas rusas y los centros logísticos detrás de la línea del frente.
Ucrania lleva meses pidiendo misiles de largo alcance. Hasta ahora, el apoyo proporcionado por Gran Bretaña y otros aliados, como Estados Unidos, se ha limitado a armas de menor alcance. La noticia de esta nueva dotación ha provocado una respuesta desde el Kremlin, que ha asegurado que requerirá “una respuesta adecuada de nuestros militares”.
Contraataques ucranianos: un golpe a las tropas rusas
Esta situación pone de manifiesto el creciente apoyo internacional a Ucrania y el posible cambio de las fuerzas en el conflicto. Por otro lado, el ejército ucraniano ha llevado a cabo contraataques exitosos en la zona de Bajmut y ha logrado forzar a las tropas rusas a replegarse hasta dos kilómetros, según el comandante de las fuerzas de tierra ucranianas, el general Oleksandr Syrski.
Además, el militar ha afirmado que los combatientes del grupo Wagner fueron reemplazados en algunos lugares de la ciudad por unidades del ejército regular ruso, peor preparados. Este hecho muestra el impacto directo de los contraataques ucranianos en las fuerzas rusas y su capacidad para resistir a la invasión.
Zelenski: una voz de prudencia
Pese a estos avances, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha admitido que su país necesita más tiempo para lanzar una contraofensiva efectiva contra las fuerzas rusas. Mientras su Ejército espera la entrega de la ayuda militar prometida, Zelenski ha subrayado: “(Con lo que ya tenemos) podemos seguir adelante, pero perderíamos a mucha gente. Creo que eso es inaceptable. Así que tenemos que esperar. Todavía necesitamos un poco más de tiempo”. Las palabras de Zelenski evidencian la necesidad de Ucrania de una estrategia cuidadosa y bien pensada en este conflicto.
Sin embargo, el jefe del grupo Wagner, Yevgueni Prigozhin, ha calificado las declaraciones de Zelenski como “una artimaña”. Según Prigozhin, la contraofensiva ucraniana “ya va a toda marcha”. El líder de los mercenarios ha afirmado que el Ejército ucraniano “ataca por los flancos en el frente de Bajmut y, lamentablemente, en algunos lugares de modo exitoso”.