Es escocés y ha dejado una enorme impresión en su último juego
El Real Madrid vuelve a atacar esta vez con un joven talento residente en la Premier League, concretamente en el Chelsea de Frank Lampard. Se trata de Billy Gilmour, que entre otras cosas es apodado el Iniesta escocés. Dueño de un talento impresionante, esta joven promesa de tan solo 18 años es la guinda para catapultar un medio campo a futuro lleno de magia y proyección.
Acaba de debutar con los blues, y ha estado al corte enfrentando nada más y nada menos que al Liverpool, equipo que han podido eliminar de la FA Cup entre semana. Su desempeño fue excelente, y luego de eso han llovido elogios. Maneja muy bien el juego en el centro de la cancha, es ordenado y tiene un enorme pase final.
La gran masa de juegos ha llevado a Lampard a tener que improvisar, y de hecho la apuesta le ha salido bastante bien. Se ha ganado un espacio en las menciones del compromiso y también ha despertado algo que había estado ahí y que no se habían tentado a sacar, el interés de varios grandes de Europa por su joven promesa. Manchester City y Real Madrid, son ellos los dos más interesados.
Chelsea se blinda y le saca a Florentino la cartera
Al estarse hablando de un talento de este talante era apenas previsible que las cosas se tienen que manejar de ese modo. Chelsea ha corrido de inmediato y le ha extendido el contrato hasta 2023 al joven escocés, cuyo único objetivo es despistar la presión de los rivales y centrarlo en lo que es la competencia del máximo nivel en Inglaterra.
Si bien es cierto que el requerimiento continuará, al Real Madrid se le hace todo más complejo ahora, ya que Chelsea se ha tocado con el hecho de no haber podido fichar, y cree en el nuevo talento como el resurgir del club en el mundo. Del otro lado espera el City que por pedido de Guardiola ordenó revisar la situación de Gilmour de cara al futuro cercano.
Pero esto ha ido mucho peor, la sanción que le han impuesto a los citadinos tiene dos efectos, uno es que podrían salirse de lleno de la puja al quedarse sin argumentos sólidos, y dos, le dejarían en bandeja de plata al Real Madrid la posibilidad, si es que llegan a la meta interpuesta una vez entre en vigencia la cláusula que tiene el jugador. A Florentino le siguen sonando las campanas, esa es una variable que no abandona y a la cual parece determinadamente seguirle los pasos.