España ha logrado un hito en la historia de la pesca con la Unión Europea, alcanzando un acuerdo que garantiza volúmenes de captura significativos y sostenibles para los próximos años
Este acuerdo, alcanzado tras intensas negociaciones, representa un avance significativo para el sector pesquero español, ofreciendo un incremento notable en las cuotas de pesquerías clave como la merluza, además de establecer un marco de acción responsable y sostenible para la pesca en el Atlántico, el Mar del Norte, el Mediterráneo y el Mar Negro.
Un paso adelante para el sector pesquero español
El acuerdo, anunciado por Luis Planas, ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, refleja un esfuerzo notable por parte de España para incrementar el volumen y valor de las capturas en pesquerías significativas. Con una cuota asignada de 11.000 toneladas de merluza para los próximos dos años, lo que representa un aumento del 10,5%, España consigue el mayor volumen de capturas permitidas de esta especie en el último siglo. Este logro no solo beneficia a los pescadores y comunidades costeras españolas, sino que también refleja un compromiso con la pesca sostenible y responsable.
El papel clave de España en las negociaciones europeas
La influencia de España en estas negociaciones ha sido crucial, especialmente considerando que actualmente ocupa la Presidencia de turno de la Unión Europea. Bajo la dirección de Planas, las negociaciones se centraron en aumentar las cuotas de especies como la merluza sur, el rape o el gallo, manteniendo al mismo tiempo los niveles alcanzados en otras variedades importantes como el abadejo, el lenguado y la cigala.
Desafíos y tensiones en el Mediterráneo
A pesar de los logros, las negociaciones no estuvieron exentas de desafíos, particularmente en lo que respecta a las cuotas en el mar Mediterráneo. Las tensiones con países como Francia e Italia, que demandaban mayores volúmenes de pesca en esta área, llevaron a un debate prolongado. Finalmente, se llegó a un acuerdo que contempla una reducción del 5% al 6% de los días de pesca en el Mediterráneo, sujeto a la implementación de medidas como la selectividad de las capturas, la utilización de puertas voladoras y el cierre de ciertas zonas.
Frente común europeo frente a la prohibición de pesca de fondo
Otro aspecto relevante de estas negociaciones fue la posición común adoptada por varios países europeos frente a la decisión de la Comisión Europea de reducir las zonas afectadas por la prohibición de la pesca de fondo. Esta medida, que ha generado preocupación en el sector, fue objeto de análisis por parte de varios eurodiputados, quienes examinaron su impacto y la forma en que se gestó la decisión.
Un futuro prometedor para la pesca española
Este acuerdo histórico entre España y la Unión Europea es un claro indicativo de la capacidad de España para negociar y alcanzar objetivos significativos en el ámbito de la pesca sostenible. Representa no solo un triunfo para el sector pesquero español, sino también un modelo de gestión pesquera responsable y sostenible que podría servir de referencia a nivel internacional. Con este acuerdo, España se posiciona no solo como un líder en la industria pesquera, sino también como un actor clave en la promoción de prácticas de pesca que respetan y protegen los ecosistemas marinos.