Una tregua que busca liberar rehenes y reconstruir Gaza
Después de 467 días de intensos combates en la franja de Gaza, Israel y Hamás han alcanzado un acuerdo de alto el fuego que podría marcar el inicio de una nueva etapa en el prolongado conflicto. El pacto contempla la liberación de 98 rehenes en manos de Hamás y la excarcelación de más de 1.000 prisioneros palestinos, buscando un equilibrio que permita aliviar las tensiones y facilitar la ayuda humanitaria.
Mediación internacional: Egipto, Qatar y Estados Unidos en el centro de las negociaciones
El acuerdo fue posible gracias a negociaciones intensivas mediadas por Egipto, Qatar y Estados Unidos, quienes desempeñaron un papel crucial para acercar a ambas partes. Destacó la participación activa del ministro de Asuntos Exteriores israelí, Gideon Sa’ar, quien regresó anticipadamente a Israel para garantizar la firma del pacto.
Inspirado en un plan del presidente estadounidense Joe Biden, el acuerdo se implementará en tres fases. Durante los primeros 42 días, Hamás liberará a 33 rehenes, priorizando a mujeres, niños, personas mayores de 50 años y heridos. Israel, por su parte, liberará a prisioneros palestinos, excluyendo a aquellos involucrados en actos violentos como la masacre de octubre de 2023, en la que murieron 1.200 israelíes.
Retirada de tropas y regreso de desplazados
En la primera fase de la tregua, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) se replegarán hacia zonas fronterizas, abandonando puntos estratégicos como el corredor de Netzarim. Este paso permitirá el regreso de un millón de desplazados palestinos al norte de Gaza y el incremento del flujo de ayuda humanitaria.
No obstante, las fases posteriores del acuerdo aún generan incertidumbre, especialmente entre las familias de los rehenes, quienes temen que no todos los cautivos sean liberados.
Reacciones internacionales y el impacto humano
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, celebró el acuerdo: «Tenemos un acuerdo para los rehenes en Oriente Medio. Serán liberados en breve. ¡Gracias!». Por su parte, el secretario de Estado, Antony Blinken, propuso un plan para la reconstrucción de Gaza, sugiriendo una administración provisional liderada por la ANP con apoyo internacional y fuerzas árabes de seguridad.
El costo humano del conflicto es desgarrador: 46.000 muertos en Gaza, según cifras de Hamás, y 830 soldados israelíes fallecidos. Aunque Israel logró eliminar a líderes de Hamás como Yahya Sinwar, las pérdidas han sido devastadoras para ambos lados.
Un futuro lleno de retos
Este acuerdo de alto el fuego representa un paso importante hacia la paz, pero las profundas heridas y tensiones en la región plantean retos significativos para garantizar su cumplimiento. La esperanza de ambas partes es que esta tregua pueda ser el inicio de una solución sostenible y duradera para el conflicto en Gaza.