La magia del dating show también incluye las casualidades más curiosas
Hoy en First Dates nos dimos cuenta que el destino sigue haciendo de las suyas, colocando de nuevo en el camino a dos comensales que ya se conocían antes de llegar al dating show, Yanett y Unai. La primera en llegar fue la auxiliar sociosanitaria, que no se alcanzó a presentar cuando el bilbaíno ya traspasaba la puerta del restaurante.
El primer contacto visual fue un corrientazo para ambos y no tardaron en reconocer al otro. “¡Nos conocemos, te lo juro!” exclamó el chico. Mientras tanto Yanett no lo podía creer. “Cuando le he visto he pensado que, de 50.000 personas, me ponen con uno que ya conocía de una especie de cita. La verdad es que tomamos un café y hablamos un poco”.
Yanett y Unai aclaran sus diferencias en su cita de First Dates
Tanto el hombre como la comensal aclaran que sus primeros contactos afuera del dating show no fueron los mejores. De hecho la auxiliar sociosanitaria terminó bloqueando a Unai del WhatsApp. “Un día vi que no le llegaban los mensajes y no me contestaba. Pensé que había pasado algo, no quería hablarme o me había bloqueado. No quise ser chapas” comentó el comensal.
Efectivamente Yanett contó que si lo bloqueó de su aplicación de chats, pero también aclaró el por qué. “Le bloqueé porque me escribía todos los días para decirme que le gustaba, que si quedábamos más, que por qué no le contestaba…” Lo cierto es que en su reencuentro, aprovecharon para saber si eran el uno para el otro, y todo quedó muy claro.
Unai ganó la batalla pero perdió la guerra en First Dates
Ya con la situación aclarada si Yanett le había bloqueado, olvidaron ello y limaron asperezas para saber si habría oportunidad una vez salieran del restaurante. En el privado se pusieron a bailar una música muy suave y cuando menos lo esperaban, ya se estaban dando el que podría ser su primer beso.
Unai creyó que su insistencia en el pasado le estaba dando una recompensa ahora, pero no todo fue tan bonito. “Lo que me faltaba con Unai era un beso para saber que sentía yo y era la oportunidad” dijo Yanett. Luego comentó “No, no sentí nada”. En la decisión final, el bilbaíno si quiso la segunda cita como se esperaba, pero ella no aceptó otra velada como algo más que amigos. Mala suerte la de Unai.