El dating show les jugó una broma y por poco termina muy mal
El capítulo de hoy en First Dates resultó ser bien especial, con un Jesús sorprendido pero cabreado, y una Puri estupefacta. Estos dos ya habían tenido una cita en el dating show que no tuvo éxito, y ambos se rencontraban para tener una revancha en el amor. Lo que no les dijeron era que la cita iba a volver a ser con la misma persona, algo que no se esperaban.
Lo cierto es que no era así, tanto Puri como Jesús si tendrían una segunda oportunidad con personas diferentes, pero el programa les hizo creer que volverían a repetir la velada. Una broma que les funcionó a la perfección pues ambos disimulaban su desagrado, pero ya en privado cada uno manifestaba su enojo y decepción.
La broma de First Dates a Jesús y Puri fue épica
Las primeras reacciones de la mujer cuando vio al hombre sentado en la barra, fueron para morir de risa. “¿Es un sueño? No me lo puedo creer, Jesús, si llevas la misma camisa y todo. ¿En serio que eres tú?”. El comensal por su parte no se quedaba atrás. “O sea, yo estoy alucinando. Me habéis trastocado todos los planes”.
En el confesionario, Jesús no lo podía creer. “¡¿qué he hecho yo para merecer esto?!” Luego comentó “Parece que a buen puerto no llegamos. Me ha sorprendido verla de nuevo porque me pareció que la cita que tuvimos no fue por buen camino. ¡Si lo sé, no vengo!” Puri no estaba del todo tan decepcionada y agregó. “¡No me lo puedo creer! Estoy súper encantada de verle, pero no me apeo de lo que dije la otra vez”.
Lidia Torrent tuvo piedad de ellos y les avisó que se trataba de una broma orquestada por el equipo de First Dates
Las caras de ambos era de incomodidad total, pero trataban de disimular, sin éxito claro esta. La camarera tuvo piedad e intervino para decirles que todo era una broma y que efectivamente si tendrían una segunda cita pero con otras personas. Luego de eso, la expresión en sus rostros cambió y ya se les veía más aliviados, tanto así que la conversación empezó a ser agradable.
“Estás muy guapa esta noche y creo que tu cita puede ir muy bien” decía Jesús. Ella también le daba palabras de aliento al comensal. “Estoy alucinada. Oye, te veo hasta más guapo y todo hoy”. Finalmente los dos se despedían en la barra para ir a la mesa con sus respectivas citas y dejar atrás el incomodo pero divertido momento.
