Sobera pensó que en verdad se trataba de la reencarnación del dictador
Los programas de First Dates se están volviendo realitys de dobles famosos, han pasado actores, actrices, cantantes pero el de hoy es nada más y nada menos que el de Francisco Franco. “Hay algunos por la calle que me dicen: ¡Mira, Franco! y otros me han llaman Bin Laden” comentó con algo de gracia Vicente.
La mujer que lo acompañó en esta velada fue Ketty, una amante de la vida animal que tiene en su poder muchas mascotas. “Tengo 40, 13 ninfas, 26 agapornis, 1 gallina y 4 gatos, uno con 19 años que se va meando por todos los sitios, está como las personas mayores”. La madrileña visitó el dating show con la ilusión de enamorarse por primera vez.
¿Se enamorará Ketty de la reencarnación de Francisco Franco en First Dates?
La animalista confesó que nunca sintió ese sentimiento que tienen las personas cuando se enamoran. “Nunca he sentido esas mariposas en el estómago de cuando estás enamorada. Es que soy un toro bravo, tengo mucho genio, soy una persona difícil. No me aguanto ni yo misma” sentenció la madrileña.
Vicente no pudo esconder la buena impresión que le dio Ketty y pensó en voz alta. “Que suerte has tenido Vicente pasando esta puerta”. Ambos accedieron a pasar a la mesa a charlar un poco de la vida y por supuesto el físico del comensal fue uno de los temas a hablar. Y cuando decimos físico, nos referimos al parecido del hombre con el exmilitar.
Algunas cosas entre Vicente y Ketty no florecieron en First Dates
La velada prometía grandes cosas para ambos, pero en algunas charlas la cosa no se vio tan agradable. Ketty le preguntó a Vicente cuantos hijos tenía, pero la pregunta incomodó al clon de Franco. “Igual que a una mujer no se le pregunta que cuántos años tiene, a un hombre está feo preguntarle que si tiene hijos, porque se le compromete” dijo el comensal.
Aunque después de ese mal momento las cosas tuvieron un giro positivo para ambos, la cita no salió como esperaban. En la decisión final Vicente exclamó que estaba encantado con la mujer y dio el sí, pues “Pasé un momento de gran alegría y una ilusión muy grande para mí”. La animalista por su parte no pensó igual pero al igual reconoció que la pasó muy bien. “Eres encantador, pero no eres mi tipo de persona. Como amigos, encantada”.