El hecho de no cumplir con su palabra ha puesto en la boca del lobo al programa de entretenimiento
Una de las cosas que caracteriza a Sálvame, el programa de Telecinco, ha sido siempre enfocar sus noticias a fin de tener una teleaudiencia bien marcada y arraigada a lo que han querido ser. Lo que ha sucedido en estos días ha sido que en una de sus emisiones se ha mancillado su fin determinado. A través de una estrategia muy floja manteniendo la expectativa en una emisión que ha acabado de la peor manera.
Fue el 20 de diciembre cuando se emitió esa edición donde Jorge Javier armó desde su entrada una escena donde se suponía iba a contar en detalle la ruptura de una pareja muy famosa en el país. Mantenía el hermetismo porque es un compañero, presentador en la cadena que le obligaba a ser así. Desde luego la gente se ha enganchado y al final no hubo nada.
El cebo funcionó, pero luego estuvo el error de Telecinco en Sálvame que nadie les perdona
La revista Hola ya había dado el detalle, Almudena Cid y Christian Gálvez rompían su relación pero como dijeron, iba a ser a través de Sálvame que se dieran los detalles. La gente esperaba los pormenores, lo que había detonado en esa reacción en la pareja que estaba llevado una relación cordial.
Para ello han llevado una cámara en el inicio donde se recorrían los pasillos con Jorge Javier, recordando aquellas entradas triunfales del plató con todos los rostros de los panelistas en las paredes del sitio. Analizarían el tiempo de relación de la pareja, su vida en sí y como era de esperarse la bomba de su ruptura. Pero vaya sorpresa, se ha acabado la emisión y no ha pasado nada, remitiéndose a la revista como la fuente donde estaban suscritos esos detalles.
Una vez consumado engaño la gente se ha trasladado a sus espacios para sentar un precedente
No obstante, lo que en un comienzo fue su estrategia triunfó, quizás en ese sentido a los presentadores y la gente de conducción no habría que ligarles ningún error. El tema es que han dicho que el tema ha llegado a la redacción de Hola, y son ellos los que cuentan con la primicia. Ni la noticia era espectacular ya que se conocía públicamente, ni se ha llegado al fin específico y eso es ya un tema a tener en cuenta.
Usando expresiones como ‘supuestamente’, ‘al parecer’ y, por supuesto, han llevado a la gente a explotar. Pronto en Twitter se vio el descontento, haciendo referencia que botaban un anuncio tarde y fuera de todo incompleto. Llevar toda una tarde anunciando una exclusiva de la que no tienen derecho es hacerle perder el tiempo a personas que han estado invirtiendo en algo vacío. Por ahora la cosa va a sí, el reflejo habrá que detallarlo en las mediciones de audiencia de ahora en adelante.
