La presentadora desvela las nuevas realidades del Sistema Nacional de Salud sometido a un grave estrés por la pandemia
España se encuentra por debajo en la media de la Unión Europea en médicos y enfermeros, sobre todo de atención primaria, el sector que debería ser el dique de contención de la COVID-19 en esta segunda oleada. En concreto, en España no llega a 77 médicos de familia por cada 100.000 habitantes frente a los más de 123 que hay en Europa, algo de lo que ha querido destacar Susanna Griso en su Espejo Público.
Tanto es así que cada vez más se va esclareciendo que, pese a la gran fama de los últimos años en la que a España se le consideraba con la mejor sanidad del mundo, con la pandemia del coronavirus es un hecho que la Sanidad española tiene una enorme carencia de médicos y enfermeros.
La sanidad española recibe un baño de realidad con el coronavirus
Y no es algo nuevo, o al menos no tanto. Y es que, con las últmas noticias de casos como el de la Comunidad de Madrid, donde se ha postulado por otras direcciones en contra de sumar más enfermeros y médicos para bajar esta difícil situación sanitaria, la solución solo pasa por aumentar el número de médicos y enfermeros.
Ante ello, ha sido la misma Susanna Griso la que se ha referido durante la mañana de este miércoles que la Sanidad Española ha sufrido “un golpe de realidad por más que nos hayan intentado convencer que como la nuestra no hay ninguna”, ha dicho la presentadora de Espejo Público en su magazín.
Susanna Griso explica que “nos han intentado convencer que como la nuestra no hay ninguna”
Con ello, y ahora más que nunca, se ha reconocido que lo cierto es que “ha habido ocultación, pero lo peor es que ha sido necesaria una pandemia de estas magnificadas consecuencias para que hayamos tenido que verlo con nuestros propios ojos”, ha manifestado la periodista. Algo que se profundiza más con la falta de recursos.
A todo esto hay que sumar los salarios y es que España es uno de los países de la OCDE que peor paga a su personal sanitarios. Además, dentro del país, las comunidades que ofrecen los sueldos más bajos son Madrid, Andalucía y Extremadura. Y ahora, mal que nos pese, ha quedado más que descubierto ante el mundo.