Una cita que empezó como el frío del ártico y se convirtió en el calor del Sahara
Bastante épico ha resultado el giro que ha dado la cita entre Pilar y Juan en First Dates, y el cual ha emocionado a incrédulos y cautos. La comensal fue quien llegó primero al restaurante del amor esperando encontrar un Brad Pitt o un George Clooney. El golpe resultó fuerte al darse cuenta que su cita no era parecido a una estrella de Hollywood.
De igual manera, la mujer de 58 años fue consciente y decidió seguir con la velada para conocer a Juan. Las primeras charlas entre ambos, evidenciaron que la cita no iba a terminar muy bien. El comensal creyó que hablar de sus problemas de tobillo era un tema muy interesante, pero a media que pasaba el tiempo la velada tomaba otro rumbo más intrigante.
La amabilidad de Juan fue su mejor arma de seducción hacía Pilar en First Dates
Los temas acerca de lesiones y problemas físicos, fueron convirtiéndose en conversaciones acerca del ámbito íntimo. Juan siempre respondía de manera atenta y cordial y esto fue fascinando a Pilar que poco a poco se iba soltando con el veterano hombre. “Es como si le conociese de hace mucho, como un amigo de toda la vida. Me siento muy cómoda y tranquila” comentó la madrileña.
Acabada a cena, pasaron al privado para tomar el postre y participar en los divertidos juegos de First Dates. En esta ocasión les ha tocado el rasca y gana de preguntas candentes, y Pilar no ha desaprovechado la oportunidad. Juan mientras tanto se sentía un tanto intimidado, pero seguro de lo que estaba pasando allí.
La cita de First Dates entre Pilar y Juan terminó como se esperaba
Aprovechando los juegos picantes, Pilar respondió la preguntaba que decía “¿En que lugares morbosos te gustaría practicar el sexo?” La mujer sentenció “Aquí, en este restaurante”. Acto seguido, Juan sintió un libido que se apoderaba de todo su cuerpo. Pero el gesto que más erizó al hombre vino después.
La madrileña se acercó al oído de Juan y le dijo “Me encanta ducharme con hombres”. Esto descolocó completamente al hombre que luego empezó a besar el cuello de Pilar. Como era de esperar, ambos aceptaron tener una segunda cita para seguir conociendo el uno del otro o tal vez para cumplir las fantasías de la picarona mujer.
