Las reglas del juego han cambiado gracias a la lucha del feminismo o del colectivo LGTBI
Coto Matamoros inicia una segunda etapa en televisión tras varios años desaparecido. Lo hace para atacar sil filtro a Mediaset. Hay cierto temor de que sus salidas de tono sean demasiado para los tiempos que corren. Y es que todo ha cambiado mucho desde finales de los 90 en España.
En aquel momento no había esa sensibilidad que hay ahora por las causas del feminismo o de los colectivos de homosexuales. Se faltaban constantemente a las mujeres, a los gays y se vivía en una sociedad todavía muy arcaica. Desde entonces se ha trabajado mucho y ahora alguien por naturaleza machista como Coto Matamoros causa pánico.
Segunda etapa de Coto Matamoros
Coto se ve que echaba de menos liarla parda y ha regresado a España para volver a la esfera pública. En la televisión no le quieren, ya que sus métodos son demasiado contundentes y solo tendrían cabida en Mediaset, donde su hermano, con el que no tiene relación, es una estrella.
Pero las nuevas tecnologías sí que brindan una oportunidad a Coto Matamoros de volver por todo lo alto. Si Javier Negre triunfó con Estado de Alarma, o Iker Jiménez con La estirpe de los libres, el bueno de Matamoros tiene ahora un programa similar, en el que se dedica a analizar sin censura la sociedad actual.
Le quieren parar los pies a Coto Matamoros
Aunque desde muchos sectores insisten en parar los pies a este tertuliano, lo cierto es que la carta de presentación no parece que vaya a existir freno. En esta segunda etapa, Coto Matamoros estará al frente de DDT, un nuevo show que “estará fuera del control de la censura de la izquierda y será muy crítico con la situación actual de nuestra sociedad”, advierte el propio Coto.
Coto Matamoros ni siquiera es capaz de perdonar a su hermano gemelo. Un tío que asegura polémica allá por donde va y que con un canal abierto para decir lo que le venga en gana seguro que deja titulares cada semana. Por eso hasta políticos como Errejón han rescatado debates antiguos para ilustrar el peligro que entraña este señor.