Paula ha sido su rival en la Silla Azul, donde no participaba desde hace 17 programas, algo que demuestra su absoluta superioridad
Pablo se ha convertido en la estrella indiscutible de Pasapalabra. Todos los seguidores del concurso esperan el momento en el que consiga resolver con éxito El Rosco final y ganar el bote, que ya supera los 700.000 euros. Sin embargo, en el último programa de Pasapalabra, Pablo ha estado al borde de la eliminación.
Y es que el pasado martes Luis se impuso a Pablo en la prueba final, ya que éste último tuvo un fallo más. Es por eso que ha comenzado el último programa de Pasapalabra en la Silla Azul, donde ha tenido que enfrentarse a Paula para evitar ser eliminado. Algo que no sucedía desde hace varios programas.
Pablo sufre en la Silla Azul
Tal y como recordó el propio programa, hacía mucho tiempo que Pablo no se sentaba en la Silla Azul, concretamente desde hace 17 programas. Algo que demuestra que Pablo ha sido muy superior a todos los rivales que ha tenido desde la marcha de Nacho, quien sí le ponía las cosas difíciles al concursante.
Ahora, Luis ha dado un golpe sobre la mesa en Pasapalabra, enviando a su contrincante a la Silla Azul. No obstante, Pablo ha pasado sin mayores apuros la prueba, puesto que Paula ha fallado dos preguntas sobre la letra V, mientras que él no ha tenido ningún fallo con la letra O. Por lo que ha sobrevivido a la Silla Azul.
Un fallo marca la diferencia
Tras esto, el duelo final entre Luis y Pablo ha estado muy disputado. Nuevamente, el ganador del programa se ha decidido por solo un fallo, al igual que ocurrió el día anterior. Pero en esta ocasión ha sido Pablo quien se ha impuesto, puesto que no ha querido arriesgar para no cometer el mismo error.
De este modo, ahora será Luis quien se enfrente a la Silla Azul para evitar ser eliminado en Pasapalabra. Algo que no quieren los espectadores, puesto que por el momento está poniendo las cosas muy difíciles a Pablo. Una situación que ha devuelto la emoción al concurso, que no la tenía desde la marcha de Nacho.
