Sin hablar mucho, todos sabían el objetivo principal de la soltera cuando entró por las puertas del dating show y además su look demostraba que estaba buscando un prototipo de hombre en específico.
Desde que Michelle entró por las puertas de First Dates, todos los televidentes adivinaron el prototipo de hombre que estaba buscando. Luciendo unos lentes oscuros y lo que parecía un abrigo de piel, la madrileña hizo su aparición como toda una diva. ”He venido divina” comentó en su presentación, y algo que corroboró el mismo Carlos Sobera.
Su soltería estaba más que justificada, y decía que no era por mala suerte en el amor, sino todo lo contrario. Michelle afirma que le llueven pretendientes pero ninguno es digno de ella. “Creo en el amor pero tiene que ser alguien que se adapte a mi estilo de vida” decía la soltera. Además agregó que su próxima pareja, le debe consentir con joyas y viajes.
Por suerte para Michelle, su cita en First Dates cumple sus requisitos
Con un porte elegante, Jonathan entró al dating show y apenas vio a su cita en la barra, no pudo ocultar su felicidad. ”Me parece una chica guapa, con mucho estilo”. Al parecer, a la madrileña también le daba buena espina la apariencia del catalán. ”Me gusta alguien que esté dentro de las posibilidades de un estilo de vida top como el que yo suelo llevar”.
El soltero no dio muchos detalles de su trabajo, pero todo indica que tiene un cargo muy importante en una empresa, y por eso debe viajar a muchos países. ”Yo creo que él sí podría mantener mi estilo de vida. Si le veo las cualidades” decía Michelle ante las cámaras. En un momento de la velada, la chica le comentó que no sabía si quedarse en España o irse a vivir a otro país, algo que le interesó mucho al catalán.
Los estilos y personalidades de los solteros en First Dates son muy opuestos, y los polos opuestos se atraen
Es un hecho que a la comensal le gusta la vida alocada, las fiestas, las compras y ser toda una diva. Pero en cambio el soltero es más de estar centrado en su trabajo, y tener mucha responsabilidad en lo que hace. Al dar a conocer esto, todos sabían que la cita no tendría futuro, pues son dos estilos de vida totalmente opuestos.
”Lo veo muy tranquilo, pero a la vez yo soy más alocada y es como el complemento que necesito para un balance”. Decía en algún momento Michelle. Para fortuna de la madrileña, Jonathan quedó muy interesado en la chica, y además aceptó que si le gusta llevar una vida como reina, él no tiene problema en dársela.
