La aspirante ha acaparado todas las críticas por el pin de la inmunidad
Verónica lleva varias semanas siendo la protagonista absoluta de Masterchef 10. En los dos anteriores programas, toda la atención ha estado centrada en ella por su pin de la inmunidad. Un pin que ha intentado mantener en todo momento para asegurarse su continuidad en el talent culinario. Sin embargo, y cuando menos motivos tenía para soltarlo, ha terminado sucumbiendo ante la presión.
Una presión que ha sido insufrible en las últimas semanas, pues todos estaban en su contra. Todos incluyendo a los jueces, que en varias ocasiones le han recomendado soltarlo. Por su parte, sus compañeros estaban también intentando por todos los medios perjudicarla para que soltara esta ventaja. Y es que, como es lógico, querían competir contra ella en igualdad de condiciones.
La presión de los jueces de Masterchef 10 a Verónica
Desde el programa en el que se jugó la expulsión frente a Yannick, los jueces de Masterchef 10 le han estado pidiendo a Verónica que suelte el pin de la inmunidad. Sin embargo, a la siguiente semana, la aspirante volvió a jugársela. En esta ocasión fue frente a Luismi, quien acabó abandonando las cocinas. La jugada le salió a la perfección a la aspirante, que consiguió mantener el pin de la inmunidad.
Esta semana, en su duelo frente a Jokin, el cocinado se le dio bastante bien a Verónica. Sin embargo, y para sorpresa de muchos, Verónica acabó soltando el pin de la inmunidad. Esto la dejó en una situación muy comprometida, pues en el próximo programa podría abandonar las cocinas al no gozar ya de la ventaja. Una ventaja que ha soltado cuando mejor trabajo ha realizado. Y todo por la presión del programa.
El feo a Verónica en el último programa de Masterchef 10
Por si fuera poco, la aspirante también tuvo que lidiar en la anterior prueba de exteriores con una incómoda situación. Ella se convirtió en la capitana de su equipo durante la prueba de exteriores. Una prueba que no se le pudo dar peor, demostrando que no es una buena líder en cocinas. Tanto es así que los jueces decidieron no sacar uno de los dos platos de su equipo por el gran retraso que llevaba.
Esta situación se ha dado en anteriores programas, pero nunca han hecho al capitán o al responsable acudir a la sala a disculparse con los comensales. Pero esto fue lo que sucedió con Verónica. La aspirante ha sido la única de toda la edición que ha tenido que ir a dar la cara tras un pésimo cocinado. Algo muy diferente a lo que ha ocurrido con otras capitanías que han dejado a los comensales sin alguno de los platos.