La lucha entre dos activos del programa ha acabado como nadie esperaba, en retirada y un show digno de una discusión personal
El show de Sálvame ha hecho explotar a la teleaudiencia de este prestigioso programa con la rabieta de Belén Esteban ante el cruce de palabras sostenido con Kiko Jiménez. La furia de la colaboradora se dio una vez que el participante hablara de su ex pareja, Gloria Camila y la compra de su nueva casa.
La polémica se ha iniciado porque se anunciaba la noticia y él ha manifestado que no se cree que no sea una vivienda de alquiler. Cuando ha aceptado entrar en realitys es porque necesitaba del dinero, y dejaba al desnudo ciertas intimidades que han generado repudio entre el plató.
Tremendo lio ha llevado a Belén Esteban a abandona la sala de grabación en Sálvame
A partir de ese aporte la discusión se ha ido de manera desenfrenada. Y es que Kiko ha dicho que “Yo negocié con tiempo un caché más alto, pero al decir ella que sí, yo me tuve que rebajar el caché, y entonces le dije: vete tú sola. Pero como ella no quería ir sola, pues me dijo que me lo compensaba. Pero al final no lo hizo del todo”.
Belén le ha contestado que ese aporte era demasiado cutre, y que no se le podía olvidar que si había llegado al medio era precisamente por el reconocimiento de Gloria Camila. La respuesta fue que estaba allí porque el director quería que estuviera, para terminar afirmando que ella al igual está por Jesulín, rematando con el aporte de la noche: “Gracias a Dios yo no la dejé preñada”. Lo que ha hecho que se levantara y se fuera.
Los intentos por detenerla fueron inútiles bajo todo punto de vista
De inmediato Nuria Marín ha reaccionado yendo detrás de la colaboradora a pedirle que por favor no se retirara del plató. Pero cada intento fue un intento fallido. De hecho, se ha desconectado sus micrófonos y se ha marchado, asegurando que el comentario estaba fuera de todo contexto.
Rafa se ha levantado y ha pedido disculpas diciendo que hablaba desde su experiencia, sin mencionar a nadie. Y ha ido hasta donde estaba Belén para pedirle que reconsiderara su posición. Algo que jamás se dio, al punto que se tuvo que continuar sin su presencia. Menudo escándalo.