Luis ha vuelto a realizar un gran rosco final, poniéndole las cosas muy difíciles a su rival, quien ha tenido que arriesgarse para intentar empatar
Al fin, tras varios programas sin emoción alguna, Pasapalabra ha encontrado a un concursante perfecto para plantar cara a Pablo. Se trata de Luis, quien ha realizado un rosco final casi perfecto. Es por eso que ha vuelto a poner contra las cuerdas a Pablo, quien tenía muy pocos segundos por delante.
Y es que no solo eso, sino que, para empatar a su rival, tenía que acertar varias de las letras que le quedaban por responder. Eso sí, al igual que Luis, tampoco tenía ningún fallo hasta el momento, por lo que el duelo ha estado muy disputado hasta el último segundo. Sin embargo, finalmente ha habido un vencedor.
Duelo vibrante en el rosco final de Pasapalabra
Con apenas 26 segundos por jugar, Pablo tenía cinco letras sin responder y estaba por detrás en el marcados. Es por eso que Roberto Leal le ha recordado que, ya sin tiempo para Luis, debía responder dos preguntas correctamente para empatar con su rival y repartirse el premio diario de Pasapalabra.
Eso sí, no podía cometer ningún fallo, ya que sino tendría que acertar una más que Luis. Es por eso que Pablo tenía que arriesgar, y eso ha hecho. No obstante, en esta ocasión la jugada le ha salido bien, ya que ha acertado dos de las palabras, pero no ha querido arriesgar más para no perder parte del premio.
Pablo consigue empatar y acumula 600 euros más
De esta forma, el premio diario de 1.200 euros que ofrece Pasapalabra al ganador del concurso diario ha sido repartido, ganando cada uno 600 euros. No obstante, este empate refleja que Pablo ha tenido una de sus semanas más complicadas en Pasapalabra, puesto que Luis le ha puesto las cosas muy difíciles.
Incluso, Luis ha conseguido derrotar al concursante en uno de los programas, enviándolo a la Silla Azul después de 17 programas. Ahora, Pablo no ha podido pasar del empate, algo que demuestra que Pasapalabra vuelve a tener un rival más que digno para Pablo, quien ya no es el claro candidato a ganar el bote.