El presentador de La Sexta cada vez tiene más enemigos dentro de su propia ideología
Al rojo vivo es un programa que siempre está de actualidad. Para bien o para mal se habla y mucho de un Ferreras cuya trayectoria comienza a no entenderse muy bien. Porque se ha ganado a pulso que no le trague nadie en la derecha. Sin embargo, en los últimos tiempos también hay muchos en la izquierda que le quieren cortar las alas.
De entrada los enemigos en la derecha han estado y van a estar siempre. Su cruzada enorme contra los casos de corrupción del Partido Popular contrasta con el silencio administrativo cuando se ha producido alguna irregularidad en el seno socialista.
Siempre azote de la derecha
Por ello siempre ha tenido a toda la derecha en contra. Compañeros de profesión como Jiménez Losantos o Carlos Herrera emplean muchas veces a Ferreras para azotar a la izquierda. Hasta Santiago Abascal y VOX le han llevado al periodista al Congreso de los Diputados para criticar a Sánchez.
Sin embargo, de un tiempo a esta parte comienzan a aparecer muchos haters también en el seno de la izquierda. Muchos no entienden los invitados que lleva Ferreras a su programa, muchos de ellos de la más extrema derecha.
No perdonan su defensa a Eduardo Inda
Todo al principio quedaba explicado en que para que un debate político sea rico en matices debe contar con todas las opiniones. De ahí que directores de medios como La Razón (Francisco Marhuenda) u Okdiario (Eduardo Inda) debían estar ahí.
Lo que ya no ha gustado nada es que después de que la Justicia haya dictaminado que Eduardo Inda se sentará en el banquillo por supuesto acoso a los hijos de Pablo Iglesias e Irene Montero, el propio Inda siga paseándose por La Sexta y que Ferreras, su amigo personal, no diga nada. Esto para muchos es excusar al fascismo más radical.