El popular presentador del programa de las tardes de Antena 3 se molestó por su vestuario con el programa pero sin que causara ningún efecto
Sin duda alguna, Arturo Valls, está acostumbrado a todo tipo de personas, y es que el concurso de las tardes de Antena 3, en ¡Ahora Caigo!, se caracteriza por lo variopinto de sus concursantes. Pero esta vez, el presentador no ha sido protagonista por ellos sino más con el equipo que dirige el espacio.
Es por eso que a pesar de que Arturo Valls tenga normalmente acostumbrados a sus espectadores a unas entradas en ¡Ahora caigo! llenas de originalidad, estos días ha sorprendido de manera categórica a todos al hacer unas declaraciones sobre su equipo que no dejaron indiferente a nadie.
Arturo Valls ha vuelto a dirigirse a la dirección de ¡Ahora Caigo! para solicitar nuevo vestuario
“No os creáis que vengo muy contento porque hay días que no me siento muy arropado ni querido por mi equipo, y menos por dirección”, afirmó el presentador a tono de broma. “Pido pocas cosas y me dicen que no, que son caprichos de estrella”, señaló Arturo Valls ante el programa ya en emisión.
Y es que ahora se ha quejado pública e irónicamente de los que mandan en el concurso de Antena 3, para sorpresa mayúscula de todos los que se encontraban viendo el programa, tanto los del plató como los que veían el concurso desde sus casas. Y lo cierto es que bien no es para menos, como demostró.
“Una cosita que quería comentar yo, que vengo enfadado”, dijo al comienzo del programa el presentador. “Vengo mosqueado porque hace días que me voy quejando, pero dirección, como si escuchara llover”, afirmó el valenciano, donde también incluyó al respecto a Mireia, que es la azafata del programa.
El enfado no causó efecto alguno
Aquí explicó que “Mireia se cambia cada dos por tres de ropa y yo no ¡hombre!”. Y añadió que “a ver si yo no tengo derecho a expresarme a través de la moda: cambiar los colores, arriesgar con los tejidos, un estampado que me guste a mí…”, dijo el conductor del programa medio en broma medio en serio.
“¡Quiero un traje nuevo ya!”, manifestó. Para pedirlo, utilizó la táctica infantil del me enfado y no respiro, explicando que ” voy a contener la respiración hasta que me busquéis un traje nuevo para mañana”. Pero como nadie del equipo se acercaba, el de ¡Ahora Caigo! se limitó a hacer como si nada hubiera pasado. “Pues tampoco está tan mal este traje y puede aguantar unos días”, dijo entre las risas del público.
