No pierde el tiempo, pues ha dejado de lado su experiencia para enrolarse una vez más en una aventura apasionante
Pocos tienen el privilegio que tiene Lara Álvarez, que tras haber agotado su figura en Supervivientes vuelve a caer de pie, en esta ocasión en Telecinco pero sirviendo en el nuevo gabinete de Idol Kids. Esta asturiana de 35 años se enfoca en un nuevo formato pero esta vez como copresentadora al lado de Jesús Vázquez.
Su labor en esta edición va un paso más allá de acompañar el líder de la pista, es más una persona que está con los concursantes antes de salir a realizar sus actuaciones, contando sus historias y dando sus últimos consejos. Esa voz de apoyo tan importante para cada persona antes de enfrentarse al jurado y que ya ha servido en otras plataformas.
Nueva experiencia y nuevas expectativas, Lara Álvarez sale de su escondite tras su paso por Supervivientes para medirse al reto de Mediaset
Cabe recordar que esta labor ya se ha visto antes. Por ejemplo en La Voz Kids donde Juanra Bonet sacó a flote toda esa parte emocional en los concursantes, y que antes había hecho Tania Llasera con resultados similares. Ahora han depositado su confianza en Lara, eso sí guardando las distancias y partiendo del punto que este formato ha cambiado de lleno su mecánica.
En esta oportunidad lidera un grupo entero, fijando a los principales formatos de la productora y siendo la destacada tras un periplo entregando resúmenes en Secret Story. Y además ahora tras la unión con Fremantle, podrá producir las galas navideñas tan populares de Mediaset volviendo tras cinco años de ausencia.
Las segundas oportunidades no siempre son malas
El reconocimiento del público ha acabado siendo como se esperaba, positivo. Ahora la presentadora pasa por un instante glorioso y espera perdurar. Ha llegado motivada, preparada y con la seguridad de poder dar el 100 por 100 en lo que puede ser el comienzo de un segundo aire en una carrera que siempre ha estado inmersa en espectáculos.
