En First Dates, Domingo y Aideé se conocen y descubren sus diferencias, desde gustos literarios hasta expectativas en una relación.
Domingo, también conocido como Chomin, se considera una persona sensible y apasionada por el conocimiento. Cita a Antonio Machado en el programa de First Dates diciendo que es “bueno, en el mejor sentido de la palabra” y busca una relación estable y compañera de vida. Su padre, en paz descanse, le advirtió con humor: “Hijo mío, folla todo lo que quieras, pero no te me cases más veces”.
Aideé, por otro lado, es una mujer creyente que tiene una relación especial con Dios. Al ver a Domingo, no sintió atracción física, ya que prefiere hombres más altos y musculosos. A pesar de esto, decidieron conocerse y explorar la posibilidad de una conexión más profunda.
Una cita llena de contrastes en First Dates
Durante la cena, Aideé le contó a Domingo que lleva solo cuatro meses en España y que está centrada en sus hijos. Domingo, quien lleva sin pareja y sin relaciones sexuales desde 2011, le confesó que busca una compañera para compartir experiencias y la vida. Aideé se sorprendió al saber que Domingo se considera “virgen” nuevamente debido a su larga abstinencia.
La conversación sobre sus intereses personales mostró más diferencias. Domingo disfruta del ocio cultural, pasear y leer, siendo Gabriel García Márquez su escritor favorito. Sorprendentemente, Aideé le reveló que tuvo una revista política y que García Márquez era su socio, hablando con él todas las semanas. A pesar de esta conexión literaria, Aideé encontró aburrido el interés de Domingo por el ocio cultural.
Desencuentros y revelaciones inesperadas
A medida que la conversación avanzaba, Aideé comentó que pensaba que Domingo tenía al menos 60 años, aunque en realidad tiene 53. Notó detalles como sus dientes pequeños y amarillos, algo que le resultó poco atractivo. También hablaron sobre deportes, donde Aideé expresó su desinterés en practicarlos, aunque disfruta viéndolos.
La charla se desvió hacia temas más personales y sexuales. Aideé confesó su fantasía de tener relaciones con un policía español, mientras que Domingo, con dificultad, mencionó su interés en una bibliotecaria de los Museos Vaticanos por su cultura. Aunque estas revelaciones aportaron un toque de humor, no lograron acercarlos más.