El polémico experto en asuntos médicos, el señor Carballo, vuelve a dar la matraca alertando de nuevas variantes del virus
Da la sensación de que hagamos lo que hagamos, para el Doctor Carballo, experto de La Sexta Noche, no hay ningún pronóstico positivo. Cada vez que va a un plató de televisión se las da de alarmista, un mensaje que calaba al principio, pero a que a estas alturas empieza a cansar a los espectadores.
Cada vez que dice algo bueno el Doctor en La Sexta Noche, al final pone un pero. “Estamos bien, pero ojo que en Dinamarca se han eliminado restricciones y han subido muchos los casos”, asevera. También dice que “el escenario para Semana Santa es positivo, pero seguro que llegan nuevas variantes y aparece otra ola”, puntualiza.
Los malos augurios del Doctor de La Sexta Noche
Un constante poner peros que cabrea a la audiencia. Sin ir más lejos, si uno se pasea por las redes sociales, muchos acusan al doctor de La Sexta Noche como alguien que cumple un papel y que siempre tiene que decir cosas negativas para generar debate. Nadie se traga tanto alarmismo con la población vacunada y la incidencia desplomándose.
El doctor de la Sexta Noche ya es un clásico
Desde que La Sexta Noche ha decidido abrir espacios para notificar y tratar temas acerca de la pandemia y sus efectos, nadie mejor y más polémico que César Carballo. El doctor que ha sido un crítico acérrimo del gobierno español, ha salido en esta oportunidad arrojando datos y consejos.
No concibe de qué manera el estado cree que las prevenciones lo son todo, y deja pasar por alto las cifras catastróficas de por medio. De hecho, la pandemia no se ha acabado como afirma por ejemplo el gobierno de Dinamarca, e Israel que aceleró su refuerzo en vacunas y sin embargo la pasan bastante mal.
Los datos para César Carballo centralizan toda su preocupación expuesta en La Sexta Noche
El mejor ejemplo para él sin duda lo tiene el conglomerado de acumulación de contagios en niños menores de 11 años. Mientras estuvieron en casa se infectaron, y ahora que han regresado se infectan mucho más. En una clase de 30 niños, 1,7 salen infectados en promedio, y luego ha ido de los 20-29 y 40-49.
Lo que quiere decir claramente que el problema médico no ha acabado, y el gobierno debe tomar más cartas en el asunto distintas a lanzar solo ayudas en escenarios vanos. La prevención por supuesto que es importante y la vacunación como ayuda, pero la ejecución del poder debe estar plasmada en su gente.
El gobierno sigue ocultando datos que él se va a encargar de exponer siempre que sea necesario
Basando su ponencia en los datos, dice que es imposible querer apagar un incendio cuando se mueren 100 personas en promedio por día. Además, cree que ese número va a ir en alza, ahora mucho más porque inevitablemente el virus sigue mutando y no dejará de hacerlo.
Ya él había lanzado la idea de imponer los medidores de CO2 en los recintos cerrados, tratando de encontrar respuestas mucho más lógicas y asertivas en escenarios que lo necesitan. Sin embargo, ha criticado que la única herramienta sea dejar el paso a los efectos de prevención. Increíble.