La velada fluía bastante bien hasta que llegaron al privado y decidieron jugar a las balotas del amor. Ambos pensaron que no debieron hacer eso en especial el chico, quien más se incomodó con el momento.
El amor puede ser algo complejo pero a la vez simple, con una sola acción puedes tener éxito o arruinar la cita, algo así como le pasó a Cristóbal en First Dates. El gallego de 23 años reveló que le gusta el anime, los videojuegos y el cine en general. Unos gustos que en su mayoría encajaron con Carmen, la chica con la que iba a cenar.
En su presentación, la viguesa dijo. ”Soy una chula pero luego soy un amor”. Entre sus gustos está el de viajar, pasear por el monte, el séptimo arte. Lo que no tolera es que los chicos con los que está jueguen a los videojuegos por horas y horas. En especial si es el popular videojuego de rol, LOL (League Of Legends).
Cristóbal es aficionado a los videojuegos, pero no al LOL, punto a favor en su cita de First Dates
Al saber que su cita jugaba videojuegos, quiso saber que clase, y el gallego le dijo que su favorito es Pokémon. La chica pensó “bueno, al menos no juega al LOL”. Los chicos seguían encontrando cosas en común como la de tener 2 hijos, aunque más adelante. También les gustaba el cine, aunque a Carmen le aburre el de blanco y negro.
Cuando ya habían entrando en confianza, la chica de 23 años le contó una historia muy fuerte acerca de ella. ”Tengo una enfermedad un poco rara, tenía un tumor en el cuerpo que me generaba mucha cortisona. Me lo tuvieron que quitar y me quitaron medio pulmón”. El comensal exclamó ”Tuvo que ser muy duro ese momento” algo en lo que ella le decía “un poco”.
Todo iba bien hasta llegar al privado de First Dates
Aunque muchos no lo percibían así, la cita iba por buen camino y ambos pensaban en darse una segunda oportunidad. Sin embargo, uno de los populares juegos de las balotas arruinó todo. Y es que la prueba era mirarse a los ojos el uno al otro durante 10 segundos sin decir nada. Cristóbal se incomodó bastante al punto de estar inquieto.
Carmen ya lo notaba y le manifestaba. ”Estás nervioso. Tranquilo que no muerdo”. La situación sacó de casillas al gallego que ya no se sentía tan bien. En la decisión final, la viguesa seguía firme y dio el sí, pues además de sentirse bien la velada le gustaba los ojos del chico. Adicional ”Me ha gustado que no juegues al LOL”. No obstante Cristóbal fue sincero y expresó que no había sentido el flechazo final para animarse a tener una segunda cita.
