El talent culinario mostró el arrepentimiento del chef por unas palabras sobre la aspirante
Como bien sabemos, en esta décima edición de Masterchef una de las aspirantes que más presión ha tenido ha sido Verónica. Los jueces tenían grandes expectativas en ella, pues demostró grandes cualidades en la cocina. Sin embargo, no estaba del todo contentos con su actitud, especialmente en las pruebas de exteriores en las que tenía que ejercer de líder. Algo que no se le dio del todo bien.
Esto provocó grandes rapapolvos por parte de los jueces, especialmente de Jordi Cruz. Y es que el chef, en uno de sus peores programas, fue excesivamente duro con ella. Algo que la hizo llorar en cocinas, pues la catalogó de soberbia. Todo a pesar de que ella negaba claramente estas palabras del chef, asegurando que no era como él la estaba describiendo. Y el tiempo le terminó dando la razón.
Verónica, la más perseguida de Masterchef 10
Por lo que hemos visto durante la edición, podemos decir que Verónica ha sido la aspirante que más presión ha tenido. No solo por lo que acabamos de comentar, sino porque durante semanas ha tenido el pin de la inmunidad en su posesión. Esto no parecía gustar a los jueces, pues veían como prueba de eliminación tras prueba de eliminación Verónica decidía no usar esta ventaja.
Y a la aspirante, a pesar de que se salvó por los pelos en dos ocasiones, no le salió nada mal. Pero tuvo que soltarlo a pesar de que sabía que no iba a ser la expulsada. Todo por las broncas que se había llevado de los jueces semanas atrás por no haber soltado el pin. Al final terminó soltándolo y acabó llegando al duelo final de Masterchef 10, donde acabó sucumbiendo ante María Lo.
Jordi Cruz y su arrepentimiento en Masterchef 10
En lo que respecta al chef, hubo un programa en el que aseguró que la aspirante tenía una actitud soberbia. Sin embargo, desde la semifinal Jordi Cruz comenzó a recoger cable. Primero se disculpó por sus palabras y después aseguró que se habían precipitado al usar la palabra soberbia. No obstante, sigue creyendo que Verónica se creó una coraza para tapar el dolor que sentía.
Asimismo, se deshizo en halagos hacia ella, asegurando que su imperfección es perfecta. Esto volvió a provocar las lágrimas de la aspirante, pero en esta ocasión de felicidad. Y es que Verónica consiguió cambiar por completo la visión que tenían sobre ella, tanto los jueces como los espectadores. Ahora ofertas no le faltarán, pues ha sido una de las mejores desde principio a fin en Masterchef 10.
