La indignación de los colaboradores del programa por la celebración de fin de año
La Nochevieja estuvo cargada de grandes momentos, donde una fiesta en especial causó mucha indignación entre los colaboradores de Sálvame, y quien la protagonista, Leticia Sabater tiene mucho que ver. La celebración tuvo invitados muy especiales, entre ellos Cristini Couto, que admitió en Sálvame que estaba celebrando allí el fin de año.
Mientras la dueña de la casa, Leticia Sabater se desvincula de lo sucedido, los asistentes no han tardado en desvelar detalles de lo que allí dentro sucedía. Uno de los presentes aseguraba que la celebración se prolongó durante dos días y que tuvieron tiempo para dormir y coger fuerzas para continuar con la celebración.
La fiesta realizada por Leticia Sabater que tiene en problemas a Couto
En el lugar se identificaron 23 personas y es que la exconcursante de La casa fuerte alquila su chalet para distintos eventos. Allí, la policía acudió al lugar e identificó a todos los presentes, pero que no hicieron nada por impedir que continuase. Además, la persona que dio estas declaraciones ayudó para que Sabater terminará librada de esta situación.
Pero no todo termina así, pues según el mismo confidente una colaboradora de televisión estuvo allí y en Sálvame se descubrió que se trataba de Cristini Couto y en una conversación telefónica ella reconoce al equipo: “Tengo una resaca cariño… Sí estuve en la fiesta de la Sabater, ella no estaba”.
Los colaboradores de Sálvame se mostraron realmente molestos por la actitud de Cristini
De hecho, Cristini hace algunas bromas respecto a su asistencia a la fiesta y dice: “No vayáis a sacar nada ¿Eh? ¡A ver si me van a multar!”, decía Couto y tanto su asistencia a la fiesta como su actitud frente a toda esta situación sacaban de quicio a los colaboradores de Sálvame.
Finalmente, Kiko Hernández temeroso de un posible contagio no dudaba en insultar a la brasileña en pleno directo. Además, dice que allí había cerca de 50 personas, un número que sobrepasa las restricciones para las celebraciones navideñas en la Comunidad de Madrid, que limitaba las reuniones a solo 6 personas de dos grupos de convivientes como máximo.
