Atracción física a primera vista y conexión sexual en la charla
Directa y al grano, así fue Atalía en su visita a First Dates, con el objetivo de encontrar pareja y alguien con quien pasar un rato agradable. La mujer que también se hace llamar María, porque según ella “nadie pronuncia bien su primer nombre”, busca un chico “como el café: dulce, fuerte y caliente”. Una combinación precisa y de alguien que sabe lo que quirie.
En esta ocasión su “café” fue Fran, un vigilante de seguridad en Valencia, quien asegura que en su pueblo le llaman “Paquito La Piedra“. El comensal de 33 años, comentó que es un aficionado al deporte y al GYM. Sin embargo, la chica observó algo. “Es a lo Rafa Mora, entrena pero las piernas las deja en el prado y si hay abdominal lo hay y si no, no pasa nada”.
La conversación entre Atalía y el Valenciano se puso tan caliente en First Dates, que por poco llaman a los bomberos
En la conversación, Atalía le comentó a su cita que “me gusta llamar la atención, pero la gente es muy envidiosa y piensa que eres un putón verbenero”. El vigilante se iba calentando poco a poco y desde ahí cualquier cosa, fran la entendía de otra manera. Por ejemplo, la comensal comentó que tenía un conejo que le gustaban mucho las zanahorias, y el valenciano pensó que eran de “otras” zanahorias.
“He pensado que si a ella le sentaría bien mi zanahoria”. La chica de 30 años también le contó que su conejo había muerto, pero al ver que el comensal lo estaba entendiendo de otra manera, quiso ser clara. “El que llevo puesto lo tengo vivo, ese todavía no se ha muerto, se va a ir de parranda”. La sonrisa picarona de Fran lo decía todo.
La segunda cita entre Fran y Atalía fuera de First Dates ¿En que terminará?
Luego de que ambos coincidieran en la decisión final, la cual fue afirmativa para una segunda cita, los televidentes no podían evitar imaginar en que terminará la segunda velada. Y es que luego de lo que dijo Fran, “me gusta gustar y me pierde la belleza femenina… Por mi fama las faenas las he hecho fuera de mi pueblo”, son muchas las cosas que pueden pasar.
Lo cierto es que mal no lo van a pasar en su segundo encuentro, pues ambos mostraron conexión tanto emocional como atracción física. Fran comprobará si el conejo de Atalía sigue vivo y de paso si le gusta su zanahoria. Mientras que la chica confirmará por qué le dicen “Paquito La Piedra”, en su pueblo natal.