Clara, concisa y directa, así fue la comensal de hoy en su visita al restaurante del amor
En la mayoría de casos, los comensales que deciden visitar First Dates lo hacen por una razón, el amor, sin embargo, Anna viene con otro propósito más picante. La maquilladora profesional fue la segunda en llegar y apenas vio a Desireé, algo en ella se activó. Naturalmente hubo un primer contacto que dejó iniciar la velada muy bien.
La primera en llegar fue la otra chica (Desireé) quien resultó ser paisana de nuestro presentador Carlos Sobera. Si, era de Baracaldo, Bilbao. Como era de esperar, el vasco se puso muy contento pero esa sonrisa se fue desvaneciendo cuando la chica comentó que le gusta más Barcelona. Acto seguido, la cita en el dating show siguió con normalidad.
Sin tapujos ni pelos en la lengua, así se mostraron Anna y Desireé en First Dates
Primero empezaron hablando de sus ocupaciones como manera sutil de romper el hielo. Desireé le comentó que está trabajando en un hotel y que estudia un módulo de Negocio Internacional. Mientras tanto Anna le contó que trabaja en una discoteca, y hasta la invitó a la noche de chicas que hacen una vez al mes.
Rápidamente pasaron al tema que les interesaba, el íntimo. La maquilladora dijo confesó “ soy un poco perra, guarra y me gusta enseñar”. Desireé no se quedó atrás y expresó que está en ese punto de la vida donde no se quiere atar a una relación, sino que quiere experimentar y vivir el verdadero amor sin condiciones. La afirmación le gustó mucho a Anna que exclamó “me haz leído la mente”.
La cita entre Anna y Desireé se concretó con éxito en el privado de First Dates
Siguiendo con sus confesiones y anécdotas, Anna se siguió sincerando con su cita. “Las bolleras somos como una secta, nos conocemos todas y no quedamos en nada”. Por otra parte, la vasca confesó que no podía decir que es lesbiana del todo, porque ha estado con varios chicos. A Anna eso le importó poco o nada ya que dijo. “A mí me da igual que sea bisexual o no, mientras me sepa comer el co**, perfecto”.
Ya en el privado y mucho más cómodas, ambas aceptaron que la cita les estaba gustando mucho y para probarlo se dieron una pequeña muestra de afecto. Las dos se fundieron en un apasionado beso eso si “con un poquito de nata”. Posteriormente dijeron sí a una segunda cita, y esperamos que lo hayan pasado de maravilla en el restaurante del amor.
Alejandra también le hizo una propuesta muy indecente a Nando
Hoy en First Dates tuvimos una cita netamente internacional, Alejandra de Paraguay y Nando de Colombia. La sangre latina fue clave para que estos dos tuvieran una velada bastante ardiente, y con una final bastante inesperado. El primero en llegar fue el cafetero, que comentó que se refugia en el deporte y que ha ganado varios trofeos.
En su búsqueda de la mujer ideal, contó que “En el amor no he tenido la suerte que me habría gustado. Estoy buscando a una mujer humilde y bella de corazón“. La guaraní llegó con grandes ilusiones de encontrar el amor y cuando se dio cuenta que su cita era también latino, no se emocionó mucho.
A pesar de estar harta de los latinos, Alejandra compaginó muy bien con Nando
Alejandra se mostró sincera, aunque se lo dijo a las cámaras y no a Nando. “Estoy harta de los latinos, quería conocer a un europeo”. En esta ocasión el dating show la emparejó con un hombre de sangre latina, pero al parecer no se incomodó. De hecho hubo buena sintonía entre la pareja de comensales.
En el Rasca del amor fue donde más complicidad hubo entre los dos. Y es que tuvieron que confesar en qué lugar se animarían a tener sexo. Mientras que el colombiano dijo que le gustaría hacerlo en un camping al lado de una fogata y bajo una noche estrellada, la paraguaya fue más lanzada. “Me gustaría hacerlo en un restaurante”.
La condición de Alejandra para tener una segunda cita fuera de First Dates
La química entre ambos era innegable. Apesar de que Alejandra dijo que quería conocer un europeo de preferencia español, no le desagradó la idea de salir con un colombiano, y compartir muchas cosas en común por el hecho de ser latinos. Además de ello, la paraguaya confesó que la sangre latina siempre es más caliente que la europea.
En la decisión final, Nando tenía claro que quería seguir conociendo a Alejandra, y cuando decimos “conocer” es muy íntimamente. Ell captó el mensaje y le puso una condición para tener otra velada sin cámaras y con un final muy diferente. “Tienes que ser más pervertido”. Reto aceptado por el cafetero.